Cataluña se convierte en líder digital con nueva estrategia para centros de datos

Cataluña ha decidido dar un paso firme hacia el futuro digital, implementando una estrategia ambiciosa que la posicione como un referente en la atracción de centros de datos en el sur de Europa. Este martes, el Govern acordará la declaración de estos centros como "de interés general superior", lo que se traduce en una reducción de hasta un 50% en los plazos de tramitación para su establecimiento. Esta medida busca convertir a la región en el "puerto digital del Mediterráneo", según ha manifestado Albert Dalmau, conseller de Presidencia. La Generalitat ha delineado un marco de simplificación administrativa para atraer inversiones en infraestructura digital, un sector que juega un papel crucial en la economía moderna. Para poder beneficiarse de esta aceleración en los trámites, las iniciativas interesadas deberán cumplir con ciertos requisitos. Entre ellos, se destaca la necesidad de contar con una potencia mínima de 20 megavatios y un impacto económico que supere siete veces la inversión inicial. Además, se estipula que por cada millón de euros invertido, se generarán al menos dos puestos de trabajo. También se valorará la ejecución de actividades avanzadas, como el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial y la optimización de procesos, que no solo beneficiarán a las empresas, sino que también impulsarán la modernización de las industrias y las pymes catalanas. Este enfoque revela una clara intención de la Generalitat de no limitarse a ser un simple almacén de datos, sino de fomentar un ecosistema innovador. En la actualidad, Cataluña ya cuenta con infraestructuras clave para la conectividad digital a nivel global, como los cables submarinos de fibra óptica que conectan Europa con África y América. Según datos de la patronal del sector, Cataluña alberga el 18% de los centros de datos en España, aunque la mayoría de ellos se concentran en la provincia de Barcelona, lo que subraya la necesidad de ampliar su alcance territorial. El conseller Dalmau ha expresado la urgencia de evitar que la comunidad se quede atrás en el ámbito de inversiones digitales, recordando que en otros sectores ha habido una falta de desarrollo que ha llevado a la pérdida de oportunidades. "No queremos que nos pase lo que ha sucedido en el pasado, cuando otras regiones han avanzado mientras nosotros nos quedamos rezagados", declaró. El encuentro de Dalmau con líderes del sector, como el Cercle Tecnològic y el Barcelona Supercomputing Center, que recientemente desarrolló el primer supercomputador cuántico español, refleja el compromiso del Govern con la colaboración y la innovación. Estas medidas son parte de un plan más amplio presentado por Salvador Illa, president de la Generalitat, que busca restaurar el liderazgo económico de Cataluña en el conjunto de España. El camino hacia la recuperación económica es fundamental, especialmente tras la pérdida de posición de Cataluña en el PIB nacional, que se acentuó después de la fallida declaración unilateral de independencia en 2017. Illa ha manifestado su determinación de recuperar el terreno perdido, y su estrategia será presentada en un evento en Madrid en los próximos días, reafirmando su compromiso con la revitalización de la economía catalana. Las iniciativas para atraer centros de datos no solo se centran en la atracción de inversión, sino que también buscan construir un ecosistema que fomente la colaboración entre empresas e instituciones. La promoción de la IA y la optimización de procesos puede permitir a las empresas catalanas mantenerse competitivas en un mercado global cada vez más exigente. El desafío es enorme, pero la estrategia de la Generalitat podría significar un renacer para la economía catalana en el ámbito digital. Con un enfoque dinámico y proactivo, Cataluña está posicionándose para no ser solo un observador en la revolución digital, sino un actor principal en el escenario europeo. Si se ejecuta correctamente, este plan tiene el potencial de transformar radicalmente la economía local y generar un impulso sostenido hacia el futuro.