La transición de vehículos eléctricos en Estados Unidos se encuentra con un obstáculo mientras la demanda disminuye y los fabricantes de automóviles ajustan sus planes de producción: desafíos y posibles soluciones.
La transición a los vehículos eléctricos (EVs, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos ha encontrado un obstáculo a medida que la demanda de los consumidores disminuye y los fabricantes de automóviles ajustan sus planes de producción. A pesar de un aumento en las ventas de EVs, la tasa de crecimiento se ha reducido en comparación con años anteriores, quedando por debajo de las expectativas de los fabricantes de automóviles. Actualmente, solo el 10,8% de las ventas de vehículos nuevos son EVs, lejos de la meta de la administración Biden de alcanzar el 50% para 2030. Los principales fabricantes de automóviles como Ford y General Motors (GM) han reducido su producción de EVs y retrasado inversiones en respuesta a las ventas lentas. La falta de una red de carga sólida sigue siendo una preocupación para los consumidores, lo que dificulta la adopción. Sin embargo, la reducción de las diferencias de precio, la disponibilidad de carga mejorada y la educación sobre el ahorro de costos podrían impulsar la adopción de los EVs en el futuro.
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar
asesoramiento y
gestión comercial en el ámbito de seguros y
reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
La transición a los vehículos eléctricos (EVs) en Estados Unidos ha encontrado un obstáculo a medida que la demanda de los consumidores disminuye y los fabricantes de automóviles ajustan sus planes de producción. Si bien ha habido un aumento en las ventas de EVs en el último año, la tasa de crecimiento se ha desacelerado en comparación con años anteriores y no cumple con las previsiones de los fabricantes de automóviles. La administración de Biden ha establecido como objetivo que la mitad de todas las ventas de vehículos nuevos para 2030 sean vehículos de cero emisiones, pero actualmente solo el 10,8% de las ventas de vehículos nuevos son EVs. Los expertos creen que el progreso en la disponibilidad de cargadores y la información sobre los ahorros de costos podrían impulsar la demanda de los consumidores.
Grandes fabricantes de automóviles como Ford y General Motors (GM) han reducido la producción de sus EVs y han retrasado inversiones en respuesta a las ventas en descenso. Por ejemplo, GM ha descartado su objetivo de fabricar 400,000 EVs para mediados de 2023 y ha pospuesto el inicio de la producción de camiones eléctricos. La falta de una red de carga sólida sigue siendo una preocupación para los consumidores, con encuestas que muestran frustración por la disponibilidad y confiabilidad de las estaciones de carga. Ford también ha reducido la producción de su Mustang Mach-E eléctrico y ha pospuesto inversiones en fábricas de baterías, mientras que Tesla ha ralentizado sus planes de abrir una nueva fábrica en México.
Un factor que puede contribuir a aumentar la adopción de EVs es la reducción de la brecha de precios entre los EVs y los automóviles de gasolina. A medida que la demanda disminuye y la competencia aumenta, los fabricantes de automóviles han estado reduciendo los precios, lo que hace que los EVs sean más accesibles para un rango más amplio de consumidores. Sin embargo, mejorar la red de carga pública es crucial para hacer que los EVs sean más atractivos para los compradores de ingresos medios que priorizan la conveniencia. La ley de infraestructura bipartidista ha asignado fondos para la construcción de cargadores, pero el proceso de construcción y despliegue de estaciones lleva tiempo.
En general, la transición a los EVs en Estados Unidos enfrenta desafíos, incluida una demanda más lenta, ajustes en la producción por parte de los fabricantes de automóviles y la necesidad de mejorar la infraestructura de carga. Sin embargo, con esfuerzos para mejorar la disponibilidad de cargadores y educar a los consumidores sobre los ahorros de costos al optar por los vehículos eléctricos, aún existe potencial de crecimiento y para lograr los objetivos gubernamentales de reducción de emisiones.