Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Algunos miembros del Banco Central Europeo (BCE) han expresado su apoyo a dejar la puerta abierta a posibles subidas adicionales de los tipos de interés, según las actas de la reunión de política monetaria del 25 y 26 de octubre. Aunque en esa ocasión se decidió mantener los tipos de interés en el 4,5%, algunos miembros consideran que el BCE debería estar preparado para subirlos en caso necesario. El BCE se mostró confiado en que los tipos actuales eran suficientemente restrictivos y decidió tomarse un tiempo para evaluar las perspectivas de inflación y la evolución de la economía. En las actas también se resaltó la importancia de la persistencia y la vigilancia por parte del Consejo de Gobierno del BCE. Se enfatizó que era esencial llevar la inflación al 2% a medio plazo, pero también se advirtió sobre la posibilidad de nuevos desafíos que podrían surgir en el camino. El Consejo de Gobierno está convencido de que la inflación ha alcanzado su máximo y que continuará disminuyendo, pero existen incertidumbres en cuanto a las subidas salariales, la política presupuestaria y los riesgos geopolíticos. Además, el BCE reconoce que la economía de la zona del euro es débil y que las perspectivas económicas han empeorado. Las condiciones financieras más severas debido a las subidas de los tipos de interés y la débil demanda externa están frenando las inversiones y el consumo en la región. Sin embargo, las actas señalan que los datos indican más un estancamiento que una recesión profunda. El BCE también muestra preocupación por los eventos en Oriente Medio y cómo podrían afectar el suministro de energía a nivel mundial. Hasta ahora, la reacción de los mercados ha sido limitada, pero se mantiene la posibilidad de consecuencias negativas para el crecimiento y la inflación.