La ola de ventas en tecnología afecta a la Bolsa de Valores de Lima ante la incertidumbre

La reciente ola de ventas de acciones en el sector de la inteligencia artificial ha comenzado a extenderse hacia la Bolsa de Valores de Lima (BVL), en medio de un ambiente de aversión al riesgo que se ha apoderado de los mercados globales. Este fenómeno fue desencadenado por la irrupción de DeepSeek, una startup china que ha puesto en jaque a gigantes tecnológicos como Nvidia, cuyas acciones se desplomaron casi un 17% en la última jornada, lo que representa una pérdida de aproximadamente 600,000 millones de dólares en capitalización bursátil.

DeepSeek ha captado la atención por su modelo de negocio disruptivo, que ofrece un chatbot similar a ChatGPT, pero con un costo de producción significativamente menor. Este hecho ha generado inquietud entre los inversores respecto a la sostenibilidad de los precios de las acciones de empresas como Nvidia, que hasta ahora se habían beneficiado de su posición dominante en el desarrollo de tecnologías de inteligencia artificial. César Huiman, analista senior de equity research en Renta4 SAB, ha señalado que la eficiencia lograda por DeepSeek está "destruyendo los precios" de Nvidia y otras firmas de Silicon Valley.

La situación se ha visto agravada por la reciente caída del S&P 500, que retrocedió un 1.46%, reflejando un panorama sombrío para las empresas tecnológicas. En este contexto, la bolsa peruana no ha escapado a la tendencia. En la BVL, las acciones de Nvidia fueron las más vendidas del día, con cerca de 9.8 millones de soles en transacciones, un indicativo claro de la desconfianza que se ha apoderado de los inversionistas peruanos. Este comportamiento se ha replicado en otros activos, incluidos los ETF que replican el rendimiento del S&P 500, que también han sufrido un considerable descenso.

Los especialistas advierten que la irrupción de DeepSeek y su tecnología más eficiente está llevando a muchos a cuestionar la alta valorización de empresas como Nvidia. La presión sobre estas acciones es palpable, ya que los inversores están ansiosos por ver cómo se comportarán los resultados financieros de las grandes tecnológicas en medio de un escenario tan volátil. La inquietud se centra en si estas compañías podrán justificar sus altos gastos y si cumplirán con las expectativas del mercado.

Marco Contreras, jefe de research en Kallpa SAB, enfatiza que más allá de los números, lo que realmente preocupará a los inversores será lo que los líderes de estas empresas, como el CEO de Nvidia, tengan que decir sobre sus planes futuros. La próxima semana será crucial, con importantes reportes financieros de Tesla, Meta (Facebook), Microsoft y Apple. Sin embargo, los resultados de Nvidia no se conocerán hasta el 26 de febrero, lo que añade un nivel adicional de incertidumbre.

La presión sobre las grandes tecnológicas no solo proviene de la competencia emergente como DeepSeek, sino también de un cambio en la mentalidad de los inversores. Huiman menciona que el mercado está siendo más estricto a la hora de evaluar los resultados de estas empresas; cualquier desvío negativo respecto a las expectativas podría resultar en una sanción significativa a sus acciones. Este escenario ha llevado a una mayor aversión al riesgo entre los inversionistas, quienes están mostrando una preferencia por activos más seguros en un clima de incertidumbre.

Las repercusiones de esta situación podrían ser amplias y afectar no solo a las acciones tecnológicas, sino también a otros sectores interconectados. La caída en la cotización de empresas tecnológicas de gran envergadura podría influir en la confianza general de los inversores y en la salud del mercado en su conjunto. Además, el contagio a la BVL es un claro reflejo de cómo los eventos en mercados internacionales pueden repercutir en economías más pequeñas, como la peruana.

La tendencia a la baja en las acciones de inteligencia artificial y tecnología puede dar lugar a una reevaluación más amplia sobre el futuro de estas industrias. A medida que las empresas de tecnología continúan enfrentándose a una presión creciente, los inversores deberán ser cautelosos y considerar no solo las cifras financieras, sino también los comentarios estratégicos que puedan dar las diferentes compañías sobre cómo piensan enfrentar esta nueva competencia.

El futuro inmediato para el sector de tecnología y la inteligencia artificial parece estar lleno de incertidumbres, y con ello, los desafíos para los inversionistas se multiplican. En este contexto, será fundamental seguir de cerca las reacciones del mercado ante los resultados financieros y las proyecciones de las grandes tecnológicas, así como la evolución de nuevos competidores como DeepSeek, que han demostrado ser capaces de desafiar el statu quo existente.