Reforma del impuesto a las ganancias en Argentina: ¿Una medida cuestionable que beneficia a los sectores de mayores ingresos?
El impuesto a las ganancias en Argentina ha sufrido cambios que han reducido la cantidad de trabajadores sujetos a este tributo. Sin embargo, esta medida ha generado una transferencia de recursos hacia los sectores de mayores ingresos, lo cual plantea dudas sobre la equidad. La implementación de esta reforma ha sido criticada por su impacto fiscal y su falta de progresividad. Se requiere un plan macroeconómico que pueda reducir la inflación y mejorar la situación económica de los trabajadores. Además, la ley introduce deducciones que excluyen a muchos asalariados del tributo, generando desigualdad. Es positivo que el gobierno esté considerando revisar esta situación a través de un proyecto de ley en el Congreso. Se necesita un debate serio y profundo para reconstruir el impuesto a las ganancias y lograr un sistema tributario más justo. El desguace de Ganancias no es la solución, se requiere una estrategia más integral y sostenible para mejorar el salario real de los trabajadores.
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar
asesoramiento y
gestión comercial en el ámbito de seguros y
reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El impuesto a las ganancias en Argentina ha sufrido una modificación que ha reducido significativamente la cantidad de asalariados sujetos a este tributo. A diferencia de otros países de la OCDE, donde el impuesto a la renta representa una parte importante de la recaudación, en Argentina ha disminuido al 8,48% en 2022. Esta medida ha generado una transferencia de recursos hacia los sectores de mayores ingresos, lo cual es cuestionable en términos de equidad.
La implementación de esta reforma ha sido criticada debido a su impacto fiscal relevante para el tesoro nacional y las provincias, así como por su falta de progresividad. En lugar de atacar la caída del salario real a través del desguace de Ganancias, se requiere un plan macroeconómico sustentable que pueda reducir rápidamente la inflación y mejorar la situación económica de los trabajadores.
Además, la ley introduce una deducción única que excluye a una gran cantidad de asalariados del tributo, lo cual también genera desigualdad. Al mismo tiempo, se excluye a ciertos funcionarios públicos del impuesto cedular, lo que plantea interrogantes sobre la equidad del sistema.
Es positivo que el nuevo gobierno esté considerando enviar un proyecto de ley al Congreso para revisar esta situación. Se necesita un debate serio y profundo para reconstruir el impuesto a las ganancias y lograr un sistema tributario más justo y equitativo. El desguace de Ganancias no es la solución para mejorar el salario real de los trabajadores, sino que se requiere una estrategia más integral y sostenible.