Bermuda refuerza regulaciones sobre inversiones de aseguradoras en medio de la agitación en 777 Partners.

A raíz de la agitación financiera en torno a 777 Partners y su reaseguradora, el organismo de control financiero de Bermudas está endureciendo las regulaciones sobre las inversiones de las aseguradoras de vida en partes relacionadas, señalando un cambio crucial en la supervisión de la industria de reaseguros en el territorio británico de ultramar. La Autoridad Monetaria de Bermudas (BMA) ha iniciado un examen exhaustivo de la exposición de las empresas a activos afiliados, haciendo hincapié en la necesidad de identificar y mitigar conflictos de intereses. Ahora se requiere que las aseguradoras soliciten aprobación previa para nuevas inversiones en partes relacionadas, demostrando una correspondencia prudente con sus pasivos. Las repercusiones de la crisis en 777 Re, derivadas de inversiones arriesgadas vinculadas a la firma de inversión de Josh Wander, han generado preocupaciones sobre la adecuación de los marcos regulatorios que rigen a los reaseguradores de vida en Bermudas. Destacadamente, la saga ha puesto de relieve las estrategias de inversión adoptadas por los grupos de seguros respaldados por capital privado, acentuando los desafíos de alinear los pasivos a largo plazo con activos ilíquidos. En respuesta a estos acontecimientos, la BMA emitió una severa advertencia a las aseguradoras sobre los riesgos asociados con las inversiones en partes relacionadas y el potencial de influencia indebida en las decisiones de inversión. El regulador ha intensificado la supervisión a través de mecanismos de informes mejorados y exámenes en el lugar para escudriñar los beneficios derivados por las partes afiliadas de las inversiones de las aseguradoras. El panorama regulatorio en Bermudas experimentó cambios significativos a finales de marzo, obligando a las aseguradoras a solicitar autorización previa para nuevas inversiones con exposición crediticia a partes relacionadas. A pesar de que algunas empresas expresaron preocupaciones sobre la duplicación y la incongruencia regulatoria, la BMA se mantiene firme en su compromiso de mitigar conflictos de intereses y mejorar los estándares de gobernanza. Suzanne Williams-Charles, la directora ejecutiva de Bermudas International Long Term Insurers and Reinsurers, enfatizó la dedicación de las aseguradoras a operar dentro de un marco regulatorio que salvaguarde la estabilidad financiera y la protección de los asegurados. El enfoque en evolución en acuerdos de reaseguro respaldados por activos, especialmente aquellos que implican inversiones en créditos privados, subraya el cambio en el panorama de inversiones dentro del sector de reaseguros. Se espera que esta mayor supervisión por parte del regulador de Bermudas impacte en futuros acuerdos transfronterizos y remodelen las estrategias de inversión en la industria. A medida que la presión financiera sobre 777 Partners aumenta, culminando en la retirada de su oferta por el club de fútbol inglés Everton y enfrentando desafíos legales, las repercusiones se hacen sentir en todo el panorama asegurador. Con el grupo asegurador estadounidense A-Cap recuperando activos cedidos a 777 Partners y la agencia de calificación AM Best retirando su calificación para 777 Re, las repercusiones de la saga continúan desplegándose. Mientras Bermudas refuerza su marco regulatorio, la industria se prepara para una nueva era de supervisión y rendición de cuentas, navegando el delicado equilibrio entre oportunidades de inversión y mitigación de riesgos en un paisaje financiero en constante evolución.