NNUH enfrenta una difícil batalla para cumplir con los objetivos de tiempo de espera de pacientes en medio de desafíos de personal.

En una declaración reciente, la profesora Dwyer, directora del Hospital Universitario de Norfolk y Norwich (NNUH), abordó los desafíos actuales que enfrenta el hospital para cumplir con los objetivos del gobierno en cuanto a los tiempos de espera de los pacientes. Enfatizando que la atención en los pasillos—una práctica en la que los pacientes son tratados en los pasillos debido a problemas de espacio—solo se había utilizado una vez desde junio, afirmó que el hospital está comprometido a proporcionar un estándar de atención más alto mientras navega por las presiones de la creciente demanda y los recursos limitados. El gobierno ha establecido una directiva clara para el NHS de restaurar el estándar de tiempo de espera de 18 semanas para los pacientes referidos para tratamientos no urgentes. Sin embargo, NNUH, al igual que muchos hospitales en el Reino Unido, actualmente no está cumpliendo con estas expectativas, particularmente en su departamento de ginecología, que ha sido identificado como enfrentando dificultades significativas en la gestión del retraso de pacientes. "Tenemos un gran desafío por delante con el nuevo gobierno diciendo que durante el primer mandato necesitamos volver al estándar de 18 semanas," explicó la profesora Dwyer. Ella expresó su creencia de que alcanzar este objetivo es posible, señalando éxitos pasados como base para futuras mejoras. "Creo que ha sido alcanzable en el pasado, así que necesitamos pensar en lo que hacemos de manera diferente," agregó, pidiendo estrategias innovadoras para abordar el retraso de manera efectiva. El desempeño del hospital también fue examinado recientemente por la Comisión de Calidad de Atención (CQC), que publicó un informe indicando que NNUH necesita mejorar en varias áreas, incluyendo la formación del personal y la adecuación del equipo médico. La profesora Dwyer reconoció las preocupaciones planteadas en el informe, especialmente respecto a las experiencias del personal de minorías étnicas, discapacitados y LGBTQ+, quienes informaron casos de acoso y bullying. En respuesta a estos problemas, enfatizó que hay una política de "cero tolerancia" hacia los acosadores dentro de la organización y expresó confianza en su capacidad para fomentar una cultura más inclusiva y de apoyo en el hospital. "Soy absolutamente capaz de cambiar la cultura del hospital," afirmó. La profesora Dwyer destacó los pasos tomados para mejorar la formación del personal, aunque reconoció que ha habido retrasos en la actualización del equipo médico obsoleto. A pesar de los desafíos que se avecinan, se mantiene optimista sobre la buena voluntad y el compromiso del personal de NNUH. "Aún no hemos llegado, pero hay mucha buena voluntad. Y lo que veo todos los días es que la gente está trabajando bien en esto," observó, señalando una perspectiva esperanzadora para el futuro del hospital mientras busca mejorar la atención al paciente y el bienestar del personal en los próximos meses. A medida que aumenta la presión para cumplir con las directivas del gobierno, el liderazgo de NNUH está enfocado en navegar por estos desafíos con renovado vigor y determinación.