Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En una época en la que la salud y el bienestar están en la vanguardia de la conciencia pública, las preocupaciones sobre la salud cerebral han cobrado una prominencia creciente. El neurólogo Dr. Jonathan Rosand, que ejerce en el Centro McCance para la Salud Cerebral del Hospital General de Massachusetts, ha notado un aumento en el número de consultas de pacientes y sus familias, todos buscando orientación sobre cómo proteger la función cognitiva a medida que envejecen. En respuesta a esta demanda de respuestas, el Dr. Rosand y su equipo han desarrollado una herramienta práctica conocida como el Puntaje de Cuidado Cerebral. El Puntaje de Cuidado Cerebral es un cuestionario conciso diseñado para ayudar a las personas a evaluar su riesgo de demencia, accidente cerebrovascular y depresión. Consta de 12 preguntas que evalúan varios aspectos de la salud física y las elecciones de estilo de vida, factores que la investigación ha demostrado tener una fuerte correlación con la salud cognitiva y mental futura. La adaptabilidad de esta herramienta es particularmente notable, ya que todos los factores evaluados son modificables, lo que significa que las personas pueden tomar medidas proactivas para mejorar sus puntajes. The New York Times se ha asociado con el Dr. Rosand para hacer que esta evaluación sea accesible para su uso en el hogar. Esta iniciativa tiene como objetivo empoderar a las personas para que reflexionen sobre sus hábitos y elecciones de estilo de vida, fomentando así un mayor sentido de responsabilidad personal por la salud cerebral. El cuestionario no solo sirve como un medio de autoevaluación, sino que también alienta a los usuarios a participar en conversaciones con sus proveedores de atención médica sobre su bienestar mental. Si bien es esencial señalar que el Puntaje de Cuidado Cerebral no es una herramienta de diagnóstico, ofrece valiosos conocimientos que pueden guiar a las personas hacia elecciones más saludables. Las preguntas giran en torno a áreas clave de la salud que son ampliamente reconocidas como influyentes en la determinación del riesgo de enfermedades neurológicas de un individuo. Esto incluye actividades físicas, dieta, patrones de sueño y compromiso social, todos los cuales pueden tener impactos significativos en la salud cerebral en general. Por ejemplo, se ha demostrado que la actividad física regular mejora el flujo sanguíneo al cerebro y puede promover el crecimiento de nuevas neuronas, lo que potencialmente reduce el riesgo de deterioro cognitivo. De manera similar, una dieta bien equilibrada rica en antioxidantes, ácidos grasos omega-3 y nutrientes esenciales puede fortalecer la salud cerebral. Además, mantener conexiones sociales y participar en actividades mentalmente estimulantes son hábitos que se han relacionado con un menor riesgo de demencia. La conclusión positiva del Puntaje de Cuidado Cerebral es que replantea la conversación sobre la salud cerebral de una inevitable a una de empoderamiento. Si bien los factores de riesgo para condiciones como la demencia, el accidente cerebrovascular y la depresión pueden ser desalentadores, muchos están dentro del control de un individuo para ser modificados. Cambios simples en las rutinas diarias pueden llevar a mejoras sustanciales en la resiliencia cognitiva con el tiempo. En última instancia, el Puntaje de Cuidado Cerebral sirve como un recordatorio de que la salud es un viaje de toda la vida. Al tomar medidas proactivas y hacer elecciones informadas de estilo de vida, las personas pueden disfrutar no solo de un cerebro más saludable, sino también de una vida más plena. Como aconseja el Dr. Rosand, aquellos que realicen el cuestionario deben usar los resultados como un trampolín para discutir con sus proveedores de atención médica y adaptar una estrategia personal para una salud cerebral óptima.