Crisis de ola de calor en Europa: 47,000 vidas perdidas subrayan la urgente necesidad de acción.

Crisis de ola de calor en Europa: 47,000 vidas perdidas subrayan la urgente necesidad de acción.

Europa enfrenta una severa ola de calor, causando más de 47,000 muertes en 2023, lo que resalta la urgente necesidad de medidas de protección, especialmente para los grupos vulnerables.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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Salud 13.08.2024

A medida que Europa enfrenta las repercusiones de una ola de calor persistente, 2023 ha marcado un capítulo sombrío en la historia climática del continente. Con más de 47,000 vidas perdidas debido a causas relacionadas con el calor entre junio y septiembre, el verano actual se ha convertido en el segundo año más mortal desde 2015. Según un estudio reciente publicado en la revista Nature Medicine, un alarmante 57.5% de estas fatalidades se vinculó a dos episodios severos de calor en julio y agosto. Mientras Francia enfrenta su segunda ola de calor del verano, Météo France ha emitido alertas naranjas para 40 departamentos, subrayando la urgencia para que los residentes tomen medidas de protección para evitar la hipertermia o el golpe de calor. Aunque la ola de calor actual no se clasifica como inusualmente intensa ni prolongada, la trágica tendencia de aumento de las tasas de mortalidad durante periodos de altas temperaturas—que afecta particularmente a las poblaciones vulnerables—sigue siendo una preocupación crítica de salud pública. El equipo de investigación del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) llevó a cabo un extenso estudio en 35 países europeos, abarcando una población de aproximadamente 543 millones. Los hallazgos revelaron que las naciones del sur de Europa fueron desproporcionadamente afectadas, siendo Grecia el país con la tasa de mortalidad más alta, con 393 muertes por millón de habitantes, seguido de cerca por Bulgaria e Italia. En Francia, las estimaciones indican que las olas de calor de 2023 han cobrado más de 5,000 vidas, un recordatorio contundente de los riesgos continuos que representan las temperaturas elevadas. Los grupos demográficos más susceptibles a enfermedades relacionadas con el calor siguen siendo los ancianos, particularmente aquellos mayores de 80 años, así como las mujeres, que tienden a tener una capacidad reducida para sudar—el principal mecanismo de enfriamiento de nuestro cuerpo. Esta vulnerabilidad fisiológica puede llevar a consecuencias graves cuando las temperaturas aumentan, enfatizando la necesidad de intervenciones específicas para proteger a estos grupos en riesgo. Sin embargo, el estudio también arroja luz sobre un rayo de esperanza: el potencial de medidas proactivas para mitigar la mortalidad relacionada con el calor. Investigadores españoles han modelado cómo habría sido el número de muertes si el calor de 2023 hubiera ocurrido durante la ola de calor extrema de 2003. Sus hallazgos sugieren que las fatalidades podrían haber aumentado en un 80% en la población general y duplicarse entre los ancianos, destacando el impacto significativo de las estrategias de adaptación implementadas tras los devastadores eventos de 2003, que vieron más de 15,000 vidas perdidas solo en Francia. Estos hallazgos desafían la noción de que las muertes relacionadas con el calor son una consecuencia inexorable del cambio climático. En cambio, revelan la importancia crítica de la concienciación y la preparación para enfrentar los desafíos que plantean las temperaturas en aumento. A medida que Europa soporta otro verano de calor extremo, las lecciones aprendidas de olas de calor anteriores no deben ser olvidadas, y se deben tomar acciones robustas para proteger a las poblaciones vulnerables y reducir la mortalidad futura. La urgencia de la situación exige atención inmediata de las autoridades de salud, los responsables de políticas y el público en general, para asegurar que la historia no se repita ante un mundo en constante calentamiento.

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