Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
A medida que se acerca la temporada de otoño, las nuevas vacunas contra el Covid-19 diseñadas para combatir las variantes más prevalentes del virus ya están ampliamente disponibles, ofreciendo una línea de defensa esencial para muchos. Las vacunas actualizadas de Moderna, Pfizer y Novavax están diseñadas específicamente para las cepas que actualmente circulan, con Pfizer y Moderna enfocándose en la KP.2, mientras que Novavax aborda la cepa JN.1. Al considerar la vacunación, el tiempo es crucial. Los expertos en salud sugieren que aquellos en mayor riesgo—como las personas de 65 años o más, las mujeres embarazadas o quienes tienen condiciones de salud subyacentes—deben priorizar la vacunación tan pronto como sea posible. Por el contrario, para aquellos en menor riesgo, esperar hasta octubre podría ser beneficioso. Hacerlo podría permitir que las personas reciban tanto la vacuna contra el Covid-19 como la vacuna contra la gripe en una sola visita, maximizando la protección durante los meses de invierno. Para quienes se preguntan dónde vacunarse, las opciones son abundantes. Las vacunas están fácilmente disponibles en farmacias, consultorios médicos y diversos centros de salud. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han desarrollado un directorio en línea para ayudar a las personas a localizar los proveedores de vacunas más cercanos. Una de las principales preocupaciones para muchos es el costo asociado con la vacunación. Afortunadamente, Medicare, Medicaid y una variedad de planes de seguro privado cubren las vacunas contra el Covid para adultos. Los niños son elegibles para recibir vacunas gratuitas a través del programa Vacunas para Niños, y las clínicas de salud comunitarias a menudo ofrecen inyecciones sin costo o a bajo costo para quienes no tienen seguro o tienen una cobertura insuficiente. Aquellos que experimentan una leve enfermedad el día de su cita pueden preguntarse si deben proceder con la vacunación. Los expertos aconsejan realizar una prueba de Covid en casa si surgen síntomas, como dolor de garganta o congestión. Un resultado positivo requiere reprogramar, ya que recuperarse de una infección puede mejorar la respuesta de anticuerpos del cuerpo a la vacuna. Si la prueba es negativa y los síntomas son leves, generalmente es aceptable proceder con la vacunación, aunque las personas con fiebre deben posponerla. Los efectos secundarios son otra preocupación para los posibles receptores de la vacuna. Si bien muchas personas experimentan poco o ningún malestar, algunas pueden sufrir reacciones más notables como fiebre, fatiga o náuseas. Estos efectos suelen resolverse en unos pocos días. Es importante destacar que las personas pueden experimentar efectos secundarios similares con cada vacunación subsecuente, por lo que aquellos que se sintieron mal después de su última inyección podrían anticipar una experiencia similar. Para aliviar el malestar después de la vacunación, los CDC aconsejan no tomar analgésicos de antemano, ya que estos podrían afectar la respuesta inmune. Sin embargo, las personas pueden tomar acetaminofén o ibuprofeno después de la vacunación si es necesario y deben priorizar la hidratación y el descanso. En un enfoque interesante sobre el cuidado post-vacunación, el Dr. Peter Chin-Hong sugiere una técnica que llama "el molino de viento", que consiste en mover el brazo en círculos después de recibir la inyección para promover el flujo sanguíneo y potencialmente reducir el dolor y la hinchazón. Los paquetes de hielo y los paños fríos también pueden ofrecer alivio para los brazos adoloridos. Para aquellos que consideran recibir vacunaciones simultáneas, vale la pena señalar que muchos profesionales de la salud apoyan la idea de recibir tanto la vacuna contra el Covid-19 como la de la gripe durante la misma cita. En un comentario ligero, el Dr. Asish Jha enfatizó este enfoque dual al afirmar que "Dios nos dio dos brazos: uno para la vacuna de la gripe y el otro para la vacuna de Covid". Las mujeres embarazadas también deben ser proactivas con respecto a su vacunación, ya que enfrentan un mayor riesgo de enfermedad grave por Covid-19. Los expertos recomiendan que las futuras madres se vacunen en cualquier momento durante su embarazo, ya que los anticuerpos generados por la vacuna pueden transferirse al feto, brindando protección adicional. Por último, para aquellos que se preguntan sobre las celebraciones post-vacunación, el consumo moderado de alcohol después de vacunarse se considera generalmente aceptable. Si bien es prudente evitar el consumo excesivo que podría empeorar los efectos secundarios, darse un capricho con una bebida celebratoria puede ser un refuerzo positivo por tomar el importante paso de vacunarse. A medida que navegamos esta última fase de la pandemia, mantenerse informado y ser proactivo sobre las vacunaciones sigue siendo crucial para la salud individual y comunitaria. Con las nuevas vacunas disponibles, ahora es el momento de evaluar los factores de riesgo personales y tomar una decisión informada sobre la vacunación para garantizar una temporada invernal más saludable.