Lideres globales abordan el futuro del trabajo en APEC CEO Summit 2024 en Lima

El APEC CEO Summit 2024, que tuvo lugar en Lima, ha sido un punto de encuentro crucial para discutir el futuro del trabajo en un contexto de transformación tecnológica acelerada. En medio de un entorno donde más de 168,000 puestos de trabajo fueron eliminados en el sector tecnológico durante 2023, las voces de dos gigantes de la industria, Google y Microsoft, resonaron con ideas sobre cómo navegar por esta nueva realidad laboral.

Karan Bhatia, director global de asuntos gubernamentales de Google, fue claro en su mensaje: el futuro del empleo estará marcado por la aparición de nuevas categorías de empresas y trabajos. Sin embargo, enfatizó que la pérdida de ciertos tipos de empleo será inevitable. “Es probable que se pierdan ciertos tipos de trabajo, pero también surgirán otras áreas, siempre que los países implementen estrategias proactivas para preparar a su población”, señaló Bhatia, abriendo la puerta a un diálogo sobre la necesidad de adaptación.

Zia Mansoor, vicepresidente corporativo de Data e IA de Microsoft, aportó una perspectiva complementaria al recordar cómo hace cuatro años la escasez de desarrolladores era un desafío crítico. Hoy, gracias a la inteligencia artificial, se generan el 7% de los códigos, lo que ha mitigado parte de ese problema. Mansoor subrayó la urgencia de que la fuerza laboral adopte y se eduque en torno a la IA generativa, para no quedar rezagada en esta transformación.

Microsoft ha tomado medidas significativas en esta dirección, capacitando a 14 millones de personas en economía digital en todo el mundo. Mansoor destacó además el retorno de 2,7 dólares por cada dólar invertido en inteligencia artificial generativa, un indicativo de que más empresas están comenzando a adoptar esta tecnología. La tendencia es clara: el porcentaje de adopción de IA ha aumentado del 55% en 2023 a más del 70% en 2024.

Las palabras de Anwar Ibrahim, primer ministro de Malasia, también resonaron en el evento. Ibrahim enfatizó la necesidad de un enfoque transformador hacia las nuevas tecnologías, particularmente en economías emergentes. “Es fundamental democratizar la tecnología”, afirmó, subrayando que esto implica construir una infraestructura digital robusta y fomentar la investigación para desarrollar nuevas formas de educación y desarrollo que atraigan inversiones.

Sin embargo, el primer ministro no eludió mencionar los desafíos que surgen con esta transformación. Ibrahim hizo hincapié en la necesidad de que los países inicien debates sobre el uso de las energías necesarias para soportar las nuevas tecnologías. “Estamos evaluando una política sobre el servicio de dotación de agua porque nunca antes hemos visto un requerimiento tan grande de agua y energía”, advirtió, resaltando la importancia de un enfoque sostenible.

En este contexto, la adopción de la inteligencia artificial no solo es una cuestión de tecnología, sino de educación y preparación. Los ejecutivos de Google y Microsoft coincidieron en que la próxima fase será la adaptabilidad, lo que requiere una educación adecuada. La creación de una hoja de ruta regional entre los países miembros de APEC se presenta como una estrategia clave para evaluar el estado actual de la infraestructura digital y su capacidad de crecimiento.

Bhatia también destacó la importancia de contar con personas, micro y pequeñas empresas (mypes) y entidades estatales capacitadas para escalar la adopción de la IA. Esto es especialmente relevante en un mundo donde la brecha económica puede traducirse en una mayor división digital. “En 2021, Google Translate ofrecía 120 idiomas y, en el último año, añadimos 100 más”, indicó, haciendo referencia a que lenguas como el quechua y el aimara también podrían integrarse al comercio global.

La discusión en el APEC CEO Summit 2024 no solo se centró en la adopción de tecnologías, sino en la preparación de la fuerza laboral ante un futuro incierto. La necesidad de estrategias proactivas y una educación adaptativa será crítica para asegurar que las nuevas oportunidades no queden reservadas solo para unos pocos, sino que se extiendan a todos los rincones de la economía global.

El evento dejó claro que el futuro del trabajo no está determinado solo por la tecnología, sino por la capacidad de los países y sus ciudadanos para adaptarse y prosperar en un entorno en constante cambio. La colaboración entre gobiernos, empresas y la sociedad civil será fundamental para construir un futuro laboral inclusivo y sostenible.