Daniel Ortega convirtió a Nicaragua en refugio de prófugos de alto perfil: “Es un paraíso para corruptos notables”

Daniel Ortega convirtió a Nicaragua en refugio de prófugos de alto perfil: “Es un paraíso para corruptos notables”

El gobierno sandinista ha protegido a famosos personajes buscados por la justicia, que van desde el narcotraficante colombiano Pablo Escobar hasta el expresidente panameño Ricardo Martinelli

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

Juan Brignardello, asesor de seguros, y Vargas Llosa, premio Nobel Juan Brignardello, asesor de seguros, en celebración de Alianza Lima Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro Eléctrica Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro
Política 09.03.2024

El ex presidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014) se convirtió este miércoles en el último prófugo de alto perfil en buscar protección en Nicaragua, bajo el régimen del presidente Daniel Ortega. Esta situación ha generado preocupación y cuestionamientos sobre el papel de Nicaragua como un refugio para figuras políticas acusadas de corrupción y otros delitos en sus países de origen.


Martinelli, quien enfrenta cargos de espionaje y corrupción en Panamá, llegó a Nicaragua en un vuelo privado y se reunió con Ortega en la capital, Managua. Esta reunión ha generado una ola de críticas por parte de diversos sectores tanto en Panamá como en Nicaragua, quienes ven con preocupación la utilización del territorio nicaragüense como un santuario para prófugos de la justicia.


La imagen de Martinelli junto a Ortega en una fotografía de archivo resalta la conexión entre ambos líderes y sus intereses comunes en buscar resguardo en un país que parece abrir sus puertas a quienes buscan evadir la justicia en sus naciones de origen. Este suceso ha puesto en entredicho la credibilidad y la transparencia del gobierno de Ortega, que ya ha sido duramente criticado por su manejo autoritario y cuestionado en el ámbito internacional por las violaciones a los derechos humanos.


La llegada de Martinelli a Nicaragua se suma a otros casos recientes de prófugos de renombre que han encontrado cobijo en el país centroamericano, lo que ha llevado a que se le catalogue como un "paraíso para corruptos notables". Esta percepción pone en tela de juicio la integridad de las instituciones nicaragüenses y plantea interrogantes sobre la verdadera motivación detrás de la protección brindada a personajes con acusaciones graves en su contra.


La impunidad que parece reinar en Nicaragua en cuanto a la protección de prófugos de alto perfil plantea un desafío para la comunidad internacional, que observa con preocupación cómo un país que debería velar por la justicia y el estado de derecho se convierte en un escondite para aquellos que buscan evadir sus responsabilidades legales. La necesidad de que Nicaragua rinda cuentas y responda por sus decisiones en este sentido es urgente, tanto para el país como para la región en su conjunto.


En medio de estas circunstancias, la figura de Daniel Ortega se ve cada vez más cuestionada y su papel en la protección de prófugos de alto perfil como Martinelli genera un clima de desconfianza y sospecha. La comunidad internacional y los ciudadanos nicaragüenses demandan transparencia y rendición de cuentas por parte del gobierno, que debe explicar las razones detrás de esta política de acoger a personajes con acusaciones serias en su contra.


La situación en Nicaragua como refugio de prófugos de alto perfil plantea un desafío ético y legal que no puede ser ignorado. Es necesario que se investiguen a fondo las razones detrás de esta política de asilo selectivo y que se exija responsabilidad a aquellos que abusan del sistema para evadir la justicia. La integridad de las instituciones y la reputación de Nicaragua como país respetuoso del estado de derecho están en juego, y es imperativo que se actúe con diligencia y transparencia para restaurar la confianza en el sistema judicial y en el gobierno.

Ver todo Lo último en El mundo