Perú busca estabilidad antes de APEC 2024 ante tensiones sociales y económicas

En un contexto de creciente tensión social y económica, el presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, se reunió con líderes de los principales gremios empresariales de Perú para discutir los preparativos de la Semana de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) 2024. Este encuentro se realizó en un momento crucial, considerando las manifestaciones programadas entre el 11 y el 17 de noviembre, que han generado inquietudes sobre el posible impacto en el evento internacional.

El pronunciamiento conjunto resultante de esta reunión refleja una posición unificada entre gobernadores regionales, alcaldes, empresarios, comerciantes, colegios profesionales, iglesias y representantes de la sociedad civil. Los participantes subrayaron la importancia de APEC como una plataforma para destacar las oportunidades comerciales del país, instando a todos los actores del Perú a trabajar en conjunto para garantizar un ambiente de estabilidad.

El documento enfatiza que el Perú está en una coyuntura histórica, siendo anfitrión de las reuniones centrales que atraerán la atención de dignatarios y delegaciones empresariales de 21 economías. Esta es una oportunidad única para mostrar las potencialidades del país en el ámbito internacional, lo que podría traducirse en oportunidades de negocio y colaboración.

En su mensaje, los firmantes del pronunciamiento hicieron un llamado a todos los niveles de gobierno, así como a la sociedad civil, para que dejen de lado las diferencias que puedan generar inestabilidad. Resaltaron que es crucial evitar acciones que perjudiquen la imagen del Perú y frenen el crecimiento de emprendedores y sectores productivos, en un momento en que el país busca reactivarse económicamente.

Por otro lado, se destacó la necesidad de generar condiciones de paz social y unidad, no solo para el éxito de APEC, sino también para construir un futuro próspero en el Bicentenario de la independencia del país. Se reafirmó el compromiso de todos los sectores para colaborar en la lucha contra la inseguridad y fortalecer el estado de derecho, garantizando así un ambiente propicio para el desarrollo.

El pronunciamiento también abordó el derecho a la libertad de expresión y la protesta pacífica. Sin embargo, los líderes expresaron su deseo de que estas manifestaciones no afecten el desarrollo normal de las actividades programadas durante APEC. La invitación es a participar en un diálogo constructivo y a contribuir al desarrollo nacional en lugar de perjudicarlo.

En un claro contraste con las manifestaciones convocadas, los gremios de transporte formal decidieron no sumarse al paro anunciado para las mismas fechas de APEC. Edwin Derteano, presidente de la Fundación Transitemos, y Martín Ojeda, director de la Cámara Internacional de la Industria del Transporte, manifestaron que la paralización no representa los intereses del transporte formal y que estos sectores no apoyan acciones que generen violencia o desestabilización.

La decisión de los transportistas formales de no participar en la paralización se considera un respaldo significativo a los esfuerzos del gobierno y una muestra de solidaridad en el marco de un evento tan importante. Adrianzén destacó que la informalidad en el transporte representa un peligro para los ciudadanos y que es crucial la colaboración de todos los sectores para afrontar los desafíos pendientes.

De esta manera, el gobierno de Perú y los sectores empresariales buscan sentar las bases para un APEC exitoso que no solo promueva el diálogo y la cooperación internacional, sino que también fortalezca la imagen del país en el exterior. En la espera de este evento trascendental, la expectativa se centra en la capacidad de la nación para mantener la estabilidad y avanzar hacia un futuro más prometedor.