
Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.




En un contexto marcado por una creciente incertidumbre en el mercado de energías limpias, los inversores verdes están encontrando oportunidades significativas en un entorno que muchos consideran desfavorable para la energía renovable. La reciente declaración del expresidente Donald Trump, quien abogó por un aumento en la producción de combustibles fósiles, ha llevado a una caída en las acciones de energía limpia. Sin embargo, a pesar de esta coyuntura, se están dando movimientos estratégicos por parte de grandes inversionistas que ven en esta desventaja una ventana de oportunidad. Ignacio Paz-Ares, socio director y subdirector de inversiones del grupo de energía renovable y transición de Brookfield Asset Management, ha expresado su confianza en los fundamentos de la energía renovable, que considera más sólidos que nunca. Según Paz-Ares, las discrepancias entre la percepción del mercado y las realidades fundamentales presentan oportunidades excepcionales para adquirir activos a precios atractivos. Esta visión optimista se ha materializado en una serie de adquisiciones destacadas, donde Brookfield ha cerrado operaciones significativas en el sector de energías renovables. En apenas unos meses, Brookfield ha realizado transacciones por un valor total que asciende a miles de millones de dólares, incluyendo la compra de un negocio de energías renovables terrestres de National Grid Plc y una participación en parques eólicos marinos del Reino Unido. La reciente adquisición del desarrollador francés Neoen SA también ha sido un movimiento clave, ya que la empresa logró adquirir sus acciones a precios notablemente inferiores a los máximos históricos. Este panorama está llevando a muchos a repensar la inversión en energías limpias. Los precios de las acciones en el sector han tenido un desempeño decepcionante en los últimos años, lo que ha desalentado a algunos inversores. Sin embargo, figuras como Aniket Shah, director de estrategia de sostenibilidad en Jefferies, señalan que en momentos de desconfianza, surgen oportunidades valiosas para los que están dispuestos a arriesgarse. Por su parte, Vincent Policard, codirector de infraestructura europea en KKR & Co., destaca que los factores geopolíticos actuales están generando un contexto propicio para que los inversores a largo plazo se involucren en la transición energética. La reducción del interés de las grandes petroleras en proyectos de energías renovables ha creado un espacio menos saturado, lo que podría beneficiar a quienes buscan posicionarse en este sector. Copenhagen Infrastructure Partners, que recientemente cerró su mayor fondo de energías renovables con 12.000 millones de euros, ha comenzado a explorar nuevamente oportunidades en el Mar del Norte, que fue víctima de un "gran baño de sangre" en el pasado. Esta firma ha realizado adquisiciones en condiciones favorables, indicando que, aunque el mercado se ha enfriado, las oportunidades siguen existiendo. En Europa, los precios de la energía se mantienen en niveles elevados, impulsados en parte por la disminución de suministros de gas natural desde Rusia. Esto ha beneficiado a los propietarios de proyectos de energías renovables, quienes están viendo un aumento en la rentabilidad de sus inversiones. Jakob Baruel Poulsen, socio gerente de CIP, subraya que los precios de la energía a largo plazo son considerablemente más altos que antes del conflicto en Ucrania, lo que proporciona un entorno rentable para las energías renovables. Más allá de Europa, el interés en mercados como Estados Unidos y Australia sigue creciendo. Baruel Poulsen menciona que el nuevo fondo invertirá en estos países, donde las energías renovables y las baterías jugarán un papel crucial para satisfacer la creciente demanda energética. De hecho, se prevé que la incorporación de nuevos parques eólicos en EE.UU. aumente drásticamente en comparación con años anteriores, reflejando la tendencia global hacia una mayor adopción de energías limpias. La energía eólica y solar están emergiendo como las fuentes de electricidad más rápidas en el mundo, un hecho que coincide con un aumento proyectado en el consumo energético global. Las nuevas demandas, como las que representan los centros de datos, están impulsando un cambio hacia un futuro más sostenible. A pesar de las turbulencias políticas, la confianza en la transición energética se mantiene firme, como lo demuestra Bianca Ziccarelli, directora general de Canada Pension Plan Investments, quien afirma que su trabajo en el sector de energías renovables sigue siendo activo y productivo. En resumen, mientras el panorama macroeconómico y político puede parecer adverso para las energías limpias, una nueva estrategia de adquisición por parte de inversores verdes sugiere que las oportunidades en este sector son más abundantes de lo que parece. La visión a largo plazo y la identificación de valor en medio de la volatilidad del mercado están impulsando un cambio hacia un futuro energético más sostenible y rentable.
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