Boxbollen: el juguete fitness que conquista a celebridades y al mundo digital

En un mundo donde los juguetes de fitness suelen pasar desapercibidos, un innovador producto sueco ha capturado la atención de millones gracias a la influencia de celebridades y un ingenioso enfoque de marketing. Boxbollen, el juguete cuya simplicidad se basa en una pelota atada a una diadema, ha logrado convertirse en un fenómeno viral, principalmente gracias a la participación de figuras de renombre como Tom Brady, Conor McGregor y Khloe Kardashian. Este juguete no solo ha encontrado una forma de destacar en el saturado mercado de fitness, sino que ha cambiado la forma en que estas celebridades se conectan con sus seguidores. El viaje de Boxbollen comenzó cuando Jacob Eriksson, cofundador de la compañía, vio una versión rudimentaria en YouTube. Sin poder encontrarla a la venta, decidió crearla junto a su hermano Victor. Con una inversión inicial de 2,500 dólares, produjeron 1,000 unidades para su lanzamiento en Navidad de 2018. La respuesta fue abrumadora, triplicando sus ventas en las primeras dos semanas. Desde entonces, la compañía ha visto un crecimiento exponencial, con ingresos de 59.2 millones de dólares en 2024, en comparación con apenas 290,000 dólares en 2019. La estrategia de marketing de Boxbollen ha sido clave en este éxito. El enfoque en la colaboración directa con celebridades, en lugar de pasar por sus agentes, ha permitido a los hermanos Eriksson negociar acuerdos de siete cifras, incluso ofreciendo una parte de los ingresos a sus embajadores. Este modelo ha demostrado ser efectivo, como lo indican las cifras de visualización en TikTok y otros medios sociales. Conor McGregor, por ejemplo, generó más de 17 millones de visitas con su anuncio, mientras que otras celebridades como Wayne Rooney y Tyson Fury también ayudaron a llevar el producto a un público más amplio. La comunidad alrededor de Boxbollen se ha fortalecido gracias a una aplicación complementaria lanzada en 2021, que permite a los usuarios compartir vídeos y competir entre sí. Con 1.6 millones de usuarios, la plataforma ha cultivado un sentido de competencia y camaradería, llevando incluso a crear ligas deportivas y torneos con premios en efectivo. Este enfoque ha ayudado a los hermanos a aspirar a un ambicioso objetivo: convertir Boxbollen en el deporte de más rápido crecimiento del mundo. No obstante, el camino hacia el éxito sostenible no está exento de desafíos. Expertos en comercio minorista advierten que, aunque una compañía puede generar millones, la verdadera prueba es la sostenibilidad a largo plazo. La dependencia de ingresos estacionales y la necesidad de mantener una constante innovación y atracción de celebridades son factores que podrían complicar su crecimiento. Sin embargo, los hermanos Eriksson parecen estar conscientes de estos riesgos y han planificado su estrategia a largo plazo. A medida que Boxbollen se expande, han comenzado a ingresar al mercado estadounidense, el cual representa ya el 85% de sus ventas. Con celebridades como Tom Brady y Nicole Scherzinger en su lista de embajadores, el reconocimiento de marca ha crecido considerablemente. Sin embargo, esta dependencia de los acuerdos con celebridades presenta un riesgo inherente. En noviembre de 2023, la cancelación de citas clave en Los Ángeles puso a prueba su modelo de negocio, obligándolos a depender de préstamos para cubrir déficits de flujo de caja. La visión de los Eriksson para el futuro es ambiciosa. Con un objetivo de 100 millones de dólares en ingresos para 2025, han comenzado a explorar nuevas líneas de productos y la monetización de su aplicación. Además, han considerado la posibilidad de vender la compañía, con un precio mínimo en mente que supera los 100 millones de dólares. Esta estrategia incluye atraer socios estratégicos y generar expectación alrededor de su marca. Mientras tanto, su enfoque innovador y su capacidad para aprovechar el poder de las redes sociales han permitido a Boxbollen no solo crecer, sino también reinventar el concepto de lo que puede ser un juguete de fitness. La combinación de simplicidad, diversión y competencia ha hecho que este producto se convierta en un fenómeno cultural, abriendo la puerta a un futuro potencialmente brillante. A medida que la historia de Boxbollen continúa desarrollándose, se plantea la pregunta de si los hermanos Eriksson podrán mantener el impulso de su éxito y superar los desafíos del mercado. Con una combinación de creatividad, trabajo arduo y una pizca de suerte, han demostrado que incluso los productos más simples pueden lograr un impacto significativo en la vida de las personas y en la cultura deportiva global. El tiempo dirá si lograrán su ambicioso objetivo, pero hasta ahora, su viaje es un testimonio del poder de la innovación y el marketing en la era digital.