Demócratas divididos enfrentan incertidumbre mientras Harris se prepara para su discurso de aceptación en la convención.

A medida que la Convención Nacional Demócrata se acerca a su culminación con la Vicepresidenta Kamala Harris lista para pronunciar un discurso de aceptación en horario estelar, la atención no solo se centra en la celebración de su candidatura, sino también en un tema controvertido y divisivo para muchos dentro del partido: el conflicto en Gaza y la política exterior de EE. UU. hacia Israel. La élite del Partido Demócrata, incluidos el Presidente Joe Biden, la ex Secretaria de Estado Hillary Clinton y el ex Presidente Barack Obama, se reunirá en el United Center de Chicago, donde buscan reunir apoyo para Harris en contra de su oponente republicano, el ex Presidente Donald Trump. Sin embargo, mientras el partido se prepara para su momento crucial, una corriente significativa de insatisfacción se cierne, principalmente en torno al manejo del conflicto Israel-Gaza por parte de la administración. El telón de fondo de esta reunión política está marcado por una reciente escalada de violencia que ha dejado miles de muertos y desplazados en Gaza. Desde los ataques de Hamas en el sur de Israel el 7 de octubre, que resultaron en la muerte de alrededor de 1,200 personas y en la toma de numerosos rehenes, la respuesta militar de Israel ha suscitado un escrutinio internacional. Informes indican que más de 40,000 personas, en su mayoría civiles, han perdido la vida en el conflicto en curso. Los críticos de la política exterior de la administración Biden, particularmente en lo que respecta a las acciones militares de Israel, están proporcionando un punto de encuentro para los disidentes dentro del partido. En medio de esta turbulencia, la campaña de Harris ha sido reacia a articular una política concreta sobre la crisis. Aunque la Vicepresidenta ha pedido un alto el fuego y ha reconocido las excesivas bajas civiles, su campaña no ha adoptado las propuestas más agresivas presentadas por algunos sectores progresistas, como un embargo total de armas contra Israel. Esta ambigüedad ha llevado a un coro creciente de voces dentro de la base demócrata que clama por claridad y una postura más robusta. Una manifestación notable de este desacuerdo es el número significativo de votantes demócratas que optaron por el estatus de "no comprometidos" en la reciente primaria presidencial, un movimiento que refleja su descontento con la dirección política actual del partido. Con más de 750,000 votos registrados como no comprometidos, las apuestas son altas, particularmente en estados clave como Michigan, donde este sentimiento podría alterar potencialmente el resultado de las elecciones. En la convención, aproximadamente 36 delegados que representan el voto no comprometido planean amplificar su mensaje, abogando por un alto el fuego y un embargo de armas contra Israel. Delegados como Samuel Doten enfatizan que este movimiento no es un intento de desviar la campaña de Harris, sino más bien un impulso para que el partido se alinee más estrechamente con los sentimientos de una porción significativa de su base. "Sabemos que esto no es un pequeño esfuerzo. Estamos desafiando un statu quo de política estadounidense de los últimos 40 años, y no cambiará de la noche a la mañana", afirmó, destacando las complejidades de larga data de las relaciones entre EE. UU. e Israel. Se espera que la presencia de estos delegados, muchos de los cuales son organizadores experimentados, influya en las discusiones y posiblemente cambie opiniones entre sus colegas durante la convención. No solo buscan ser escuchados, sino abogar por un cambio de política que creen que resuena con un sector más amplio de votantes demócratas. Simultáneamente, el clima político estará cargado de manifestaciones, siendo la más grande la que se anticipa para el lunes, coincidiendo con las actividades de la convención. Los organizadores de la protesta por Gaza han reducido drásticamente las estimaciones anteriores, pero aún proyectan una participación considerable, afirmando que su objetivo es crear conciencia y promover un enfoque humanitario hacia el conflicto. A medida que avanza la semana de la convención, todas las miradas estarán puestas en cómo responde la campaña de Harris a estas preocupaciones urgentes y si tomarán medidas definitivas para abordar el tema fracturado de Gaza. La capacidad del Partido Demócrata para unificarse en torno a una política coherente podría influir significativamente no solo en el resultado de este ciclo electoral, sino también en la relación a largo plazo del partido con su base, cada vez más vocal y diversa.