El comentario de campaña de la exgobernadora Nikki Haley genera controversia y divide a los aliados en la carrera de Iowa.
La ex gobernadora Nikki Haley de Carolina del Sur bromeó durante su parada de campaña en New Hampshire diciendo que los votantes allí "corregirían" el resultado de las asambleas de Iowa. Sin embargo, su comentario no fue bien recibido por los aliados del gobernador Ron DeSantis de Florida, quien compite con Haley por el segundo lugar en las encuestas de Iowa. Los representantes locales de campaña de DeSantis interpretaron el comentario de Haley como despectivo hacia la votación de Iowa, la primera en la nación. La gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, quien ha respaldado a DeSantis, expresó su confianza en los iowanos para tomar sus propias decisiones. Este intercambio destaca los riesgos de hacer campaña en diferentes estados consecutivamente y la necesidad de navegar cuidadosamente las dinámicas únicas de cada estado.
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La exgobernadora Nikki Haley de Carolina del Sur hizo un comentario juguetón durante su parada de campaña en New Hampshire, sugiriendo que los votantes allí "corregirían" el resultado de las asambleas de Iowa. Broméo sobre cómo Iowa comienza el proceso, pero que New Hampshire sería el encargado de corregir cualquier error potencial. La multitud respondió con risas, pero su comentario no cayó bien entre los aliados del gobernador Ron DeSantis de Florida, quien compite con Haley por el segundo lugar en las encuestas de Iowa.
Los sustitutos locales de campaña de DeSantis vieron el comentario de Haley como despectivo hacia las votaciones de Iowa, programadas para el 15 de enero. La gobernadora de Iowa, Kim Reynolds, quien ha respaldado a DeSantis, expresó su confianza en los iowanos para tomar sus propias decisiones, afirmando que no se necesitaban correcciones. Bob Vander Plaats, líder evangélico de Iowa y partidario de DeSantis, consideró el comentario de Haley como una admisión de derrota en el estado de Hawkeye.
Este intercambio ocurre antes de las asambleas consecutivas en Iowa, donde tanto DeSantis como Haley están programados para participar. Estos eventos se transmitirán en vivo por CNN y representan una de las pocas oportunidades restantes para que los candidatos cambien el apoyo lejos del ex presidente Donald J. Trump. El comentario de Haley no solo refleja sus escasas posibilidades de ganar en Iowa, donde Trump sigue siendo el claro favorito, sino que también destaca los riesgos de hacer campaña en diferentes estados de manera consecutiva. Los comentarios que agradan a una multitud local pueden convertirse en desventajas en el siguiente estado.
Si bien Haley enfrenta una batalla cuesta arriba en Iowa, ha ganado terreno significativo en New Hampshire, superando a otros candidatos (excluyendo a Trump) en encuestas recientes. Sin embargo, su comentario juguetón sirve como recordatorio de cómo las estrategias de campaña deben navegar cuidadosamente las dinámicas únicas de cada estado para mantener un impulso favorable.