La Campaña de Trump se toma en serio a Iowa: Enseñando a los seguidores a participar en las asambleas, reclutando una red de base.
La campaña del ex presidente Donald J. Trump no deja nada al azar en su búsqueda de un buen desempeño en las asambleas de Iowa. Aprendiendo de su segundo lugar estrecho en 2016, están decididos a asegurar una victoria temprana en las primarias. Mientras que los competidores se centran en la campaña tradicional puerta a puerta, el equipo de Trump está tomando un enfoque diferente. Están capacitando a los seguidores para convertirse en "capitanes de las asambleas" responsables de movilizar apoyo y educar a los novatos sobre el proceso de las asambleas. Además, la campaña está utilizando una vasta base de datos para identificar a posibles asistentes a las asambleas que necesitan estímulo. Mediante mensajes de texto, llamadas telefónicas, correos electrónicos y correo directo, buscan reducir la dependencia de tocar puertas. La campaña de Trump también está aprovechando a destacados representantes republicanos para fortalecer aún más sus esfuerzos.
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar
asesoramiento y
gestión comercial en el ámbito de seguros y
reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
La campaña del ex presidente Donald J. Trump está trabajando arduamente para cumplir con las altas expectativas y evitar repetir lo sucedido en 2016, cuando quedó en segundo lugar en Iowa por poco margen. Mientras que sus rivales se enfocan en hacer campaña puerta a puerta, la campaña de Trump se centra en enseñar a sus seguidores cómo participar en las asambleas y reclutar una red de base. La campaña ha reclutado y entrenado a seguidores para que se conviertan en "capitanes de asamblea" que pueden ayudar a reclutar a otros partidarios de Trump y hablar en su nombre en los lugares de asamblea. También han estado distribuyendo carteles en los jardines, organizando eventos y recopilando información de contacto para motivar a los seguidores.
La campaña cuenta con una base de datos compilada de elecciones presidenciales anteriores que están utilizando para identificar a posibles asistentes a las asambleas que necesitan aliento para participar. Han estado enviando mensajes de texto, haciendo llamadas telefónicas, enviando correos electrónicos y utilizando correo directo para comunicarse con estos seguidores. La campaña cree que su acceso a estos datos les brinda una ventaja y reduce su dependencia de tocar puertas.
Además de su estrategia en el terreno, la campaña de Trump ha organizado eventos de "Compromiso con la Asamblea" para recopilar información de los partidarios y reclutar voluntarios. Ya han capacitado a más de 1,800 capitanes de asamblea que serán responsables de movilizar el apoyo y explicar el proceso de la asamblea a los primerizos. La campaña también ha lanzado el programa "10 para Trump", en el que se les da a los capitanes una lista de posibles partidarios de Trump en sus vecindarios y se les encarga asegurarse de que 10 asistentes a la asamblea por primera vez de la lista acudan a apoyar a Trump.
Trump y sus aliados esperan obtener un final dominante en las asambleas de Iowa para sacar a sus rivales de la carrera y asegurar una victoria temprana en las primarias. Aunque la agenda de Trump en Iowa es relativamente ligera en comparación con la de algunos de sus rivales, la campaña confía en una red de destacados sustitutos republicanos para cubrir los vacíos. Esto incluye apariciones de conservadores populares como la gobernadora Kristi Noem de Dakota del Sur y la representante Marjorie Taylor Greene de Georgia.