VP Harris toma una postura: Revelando la postura más firme de Biden sobre el conflicto entre Israel y Hamas en un audaz viaje por Oriente Medio.
La vicepresidenta Kamala Harris recientemente realizó un importante movimiento diplomático al visitar Oriente Medio, lo que señala la postura más firme de la administración Biden frente a las acciones de Israel en el conflicto entre Israel y Hamás. Su visita tuvo dos objetivos principales: dirigirse a líderes regionales mientras Israel entra en una nueva fase de la guerra y apelar a votantes descontentos en Estados Unidos, especialmente a jóvenes y personas de color. Durante su visita de tres horas a la cumbre climática de la ONU en Dubái, Harris sostuvo cuatro reuniones y llamadas de alto nivel con líderes influyentes, transmitiendo un mensaje contundente sobre las expectativas de Estados Unidos respecto al comportamiento de Israel durante y después de la guerra. Sus declaraciones hicieron hincapié en el rechazo a la reubicación forzada o asedio de los palestinos y a cualquier cambio en las fronteras de Gaza. La elección de Harris como mensajera fue intencional, con el objetivo de fortalecer sus relaciones con líderes regionales y abordar las preocupaciones de los votantes demócratas que sienten que el presidente Biden no ha sido lo suficientemente firme con Israel. Funcionarios de la Casa Blanca han enfatizado que las declaraciones de Harris están alineadas con las opiniones de Biden y que él ha sido franco en sus conversaciones privadas con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.
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El reciente viaje de la vicepresidenta Kamala Harris al Medio Oriente fue un movimiento audaz en el ámbito de la diplomacia en tiempos de guerra y una clara señal de que la administración Biden está adoptando una postura más firme frente a las acciones de Israel en el conflicto entre Israel y Hamás. El propósito de su visita fue doble: dirigirse a líderes regionales en el Medio Oriente mientras Israel entra en una nueva fase de la guerra de ocho semanas que ha cobrado la vida de miles de civiles, y apelar a votantes descontentos en Estados Unidos, especialmente a votantes jóvenes y personas de color que desempeñaron un papel crucial en la elección del presidente Biden.
Durante su breve estancia de tres horas en la cumbre climática de la ONU en Dubái, Harris logró manejar cuatro reuniones y llamadas de alto nivel con líderes influyentes de la región. Su mensaje, tanto en discusiones privadas como en declaraciones públicas, fue una de las expresiones más contundentes de las expectativas de Estados Unidos respecto a la conducta de Israel durante y después de la guerra. Entre sus puntos clave se encontraba el rechazo inequívoco a la reubicación forzada o asedio de los palestinos, así como cualquier alteración de las fronteras de Gaza.
La elección de Harris como mensajera de este mensaje fue deliberada. Si bien tanto Harris como el presidente Biden han expresado su apoyo a Israel y la necesidad de proteger a los civiles en Gaza, el papel de Harris al entregar esta advertencia en un escenario global fue una oportunidad para que ella brillara y solidificara sus relaciones con los líderes de la región. Además, sirvió para abordar las preocupaciones de algunos votantes demócratas que sienten que Biden no ha sido lo suficientemente firme en relación a las acciones de Israel. Funcionarios de la Casa Blanca han enfatizado que los comentarios de Harris están alineados con las opiniones de Biden y que él ha sido franco en sus conversaciones privadas con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.