Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un giro impactante en la guerra civil siria, la ofensiva rebelde que comenzó el 27 de noviembre ha logrado avanzar hacia la capital, Damasco, en un tiempo récord de apenas 12 días. Este avance, considerado por muchos como una de las ofensivas más exitosas desde el inicio del conflicto en 2011, se debe a una combinación de factores que han debilitado significativamente al régimen de Bachar al Asad. Hadi al Bahra, presidente de la Coalición Nacional Siria para la Revolución y la Oposición (CNFROS), desglosó en el Foro de Doha las razones detrás de este éxito inesperado. Al Bahra subrayó que la preparación y el entrenamiento de las tropas rebeldes han sido esenciales para su éxito en el campo de batalla. "Los soldados de la oposición han estado entrenándose durante más de una década, con nuevas incorporaciones y un enfoque en el uso de tecnología moderna como drones y armamento avanzado", explicó. Este contraste con las fuerzas de Al Asad, que parecen haber retrocedido en su preparación y moral, ha sido un factor determinante en el curso de la ofensiva. La estrategia de combate adoptada por los rebeldes, que incluyó un sistema de turnos de ocho horas de combate, permitió que las fuerzas insurgentes mantuvieran una presión constante sobre el régimen. "La operación fue una sorpresa para el régimen, que subestimó nuestra capacidad de movilización y planificación", agregó al Bahra, destacando la importancia de esta táctica en el resultado de la ofensiva. Por el contrario, la moral de las tropas leales a Al Asad se ha desplomado. Según al Bahra, el impacto del debilitamiento de Hezbolá, junto con una escasez de apoyo logístico y aéreo por parte de Rusia e Irán, ha dejado al régimen en una posición vulnerable. "Los soldados del régimen están mal equipados y viven en condiciones deplorables", afirmó, describiendo una situación en la que muchos no tienen ni siquiera ropa adecuada para el invierno. La falta de recursos y el abandono por parte de sus aliados han llevado a las tropas de Al Asad a una crisis de motivación. Al Bahra enfatizó que "los soldados no tienen claridad sobre por qué deberían luchar", mientras que los rebeldes, muchos de los cuales son desplazados internos, luchan por un futuro en el que puedan regresar a sus hogares. Esta diferencia en la motivación entre los dos bandos es palpable y juega un papel crucial en la dinámica de la guerra. El conflicto en Siria ha dejado una profunda huella en la población civil. Más de 14 millones de sirios han sido forzados a abandonar sus hogares, y el sufrimiento es palpable en todo el país. Según la ONU, más del 70% de la población necesita asistencia humanitaria, y el 90% vive por debajo del umbral de la pobreza. Estas cifras reflejan un contexto humanitario desolador que se agrava a medida que las hostilidades continúan. El régimen de Al Asad, que ha estado en el poder durante 24 años, se enfrenta a un momento crítico. La rápida toma de Damasco por parte de los insurgentes liderados por la agrupación HTS, sin apenas resistencia, podría marcar el inicio de un cambio drástico en la guerra. Este episodio no solo tiene implicancias militares, sino que también podría tener un profundo impacto político en la región y en las dinámicas de poder en Siria. A medida que la situación se desarrolla, la comunidad internacional observa con atención. La caída de Damasco podría llevar a una reconfiguración del mapa político en Siria, y la necesidad de un enfoque humanitario y diplomático se vuelve más urgente que nunca. Las consecuencias de esta ofensiva y la respuesta del régimen y de sus aliados serán determinantes en el futuro inmediato del país. La guerra en Siria ha sido un conflicto complejo y multifacético, y los recientes eventos resaltan la fragilidad del régimen de Al Asad. La historia de fracasos y éxitos en el campo de batalla está lejos de estar completa, pero lo que es seguro es que la resistencia y la lucha por la libertad de millones de sirios continúan, y el camino hacia la paz sigue siendo incierto.
