
Juan Brignardello Vela
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LAKELAND, Fla. — A medida que se acerca el final del entrenamiento de primavera, la rotación de lanzadores de los Detroit Tigers está tomando forma, con Casey Mize y Jackson Jobe emergiendo como componentes clave en lo que muchos esperan sea una alineación formidable. Este dúo, que representa tanto experiencia como potencial juvenil, encarna el enfoque renovado de la franquicia mientras buscan construir sobre el regreso a los playoffs de la temporada pasada. Para Mize, el camino ha sido particularmente tumultuoso. Una vez considerado la joya de la corona del sistema de granjas de los Tigers tras ser seleccionado en primer lugar en el draft de 2018, Mize enfrentó una montaña rusa de lesiones y desafíos de rendimiento que lo mantuvieron al margen durante la carrera de playoffs del año pasado. Mientras el equipo celebraba romper una sequía de diez años sin playoffs, Mize se encontró observando desde la línea de banda, una experiencia agridulce que alimentó su determinación durante toda la temporada baja. Reflexionando sobre ese momento, Mize comentó sobre la soledad que sintió al ver a sus compañeros desde lejos. "Fue agridulce", compartió. "Me sentí como un extraño de alguna manera. Y nunca quiero volver a sentirme así." Este ardiente deseo de recuperar su lugar en la rotación lo ha impulsado a través de un entrenamiento de primavera redentor, culminando en un lugar en el roster del día inaugural. La preparación de Mize implicó ajustes significativos, incluyendo visitas a instalaciones de entrenamiento de élite donde perfeccionó sus habilidades y redefinió su repertorio de lanzamientos. Su splitter característico ha mostrado un vigor renovado, ahora alcanzando velocidades más cercanas a las 90 mph y recuperando su notoria acción de inmersión. Esta primavera, ponchó a 18 bateadores en solo 16 entradas, demostrando una mejora notable respecto a las luchas de la temporada pasada. "Vimos un poco de eso a lo largo de la primavera," dijo el manager A.J. Hinch, reconociendo la evolución de Mize. "Él carga el peso del mundo sobre sus hombros... pero cuando su espalda está contra la pared, luchará." La fe depositada en Mize es un testimonio de su arduo trabajo y resiliencia, y muchos dentro de la organización creen que esta podría ser la temporada en que aproveche su máximo potencial. Uniéndose a Mize en la rotación está el muy publicitado Jobe, quien entra en su temporada de novato con muchas expectativas. A pesar de una primavera en la que mostró destellos de brillantez—como su recta en las altas 90 mph y su curva afilada—Jobe aún está encontrando su lugar en las grandes ligas. Su experiencia el año pasado, aunque breve, le ofreció un vistazo de lo que puede esperar a este nivel. "Simplemente nunca se sabe," dijo Jobe sobre hacer la rotación. "Intenté no pensar demasiado en eso. Solo traté de aprender tanto como pudiera en este campamento." La decisión de los Tigers de mantener a Jobe en las grandes ligas en lugar de enviarlo a Triple-A refleja un compromiso con el desarrollo del talento joven en medio de la competencia. A medida que se asienta en la rotación, Jobe necesitará perfeccionar su capacidad para finalizar a los bateadores y mejorar su comando, un desafío que no le es ajeno. "Hay una diferencia entre ser un lanzador general que tira strikes y un tipo que ejecuta un lanzamiento a la vez," señaló Hinch, enfatizando la importancia de la precisión en las grandes ligas. Mientras que el brío de Jobe—evidente en su declaración de estar "cansado de intentar marcar el trasero de un mosquito"—inyecta emoción a su enfoque, el cuerpo técnico estará atento para asegurarse de que equilibre la agresividad con el comando. Mize y Jobe se unirán a los compañeros lanzadores Tarik Skubal, Jack Flaherty y Reese Olson, formando una rotación que tiene el potencial de ser un pilar del éxito de los Tigers esta temporada. Cada lanzador aporta un estilo y capacidad únicos, y su rendimiento colectivo podría resultar crucial mientras los Tigers buscan construir sobre el éxito en los playoffs del año pasado. Mientras tanto, los Tigers también enfrentan decisiones respecto a la composición del roster mientras finalizan su alineación para el partido inaugural de la temporada contra los Angeles Angels. Kenta Maeda, quien tuvo dificultades la temporada pasada, comenzará el año en el bullpen, mientras que Keider Montero ha sido enviado a las ligas menores. Con una competencia adicional por puestos clave aún en desarrollo, las decisiones tomadas en los próximos días darán forma a las perspectivas del equipo para la temporada que se avecina. A medida que los Tigers se preparan para embarcarse en una nueva campaña, todas las miradas estarán puestas en Mize y Jobe. Sus trayectorias, entrelazadas pero distintas, simbolizan la esperanza de los Tigers por un futuro brillante y un regreso a la prominencia en los playoffs. Si pueden cumplir con su potencial, la rotación de los Tigers no solo podría sostenerse, sino también convertirse en una de las más feroces de la liga.
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