Jokić brilla mientras los Magic luchan: una historia de dos equipos en la segunda mitad de la NBA.

Jokić brilla mientras los Magic luchan: una historia de dos equipos en la segunda mitad de la NBA.

A medida que avanza la temporada de la NBA, Nikola Jokić brilla con un tiro estelar, mientras que el Orlando Magic lucha con una mala precisión en los triples.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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Deportes 21.02.2025
A medida que la temporada de la NBA avanza hacia su segunda mitad, han surgido varias tendencias intrigantes que muestran los altibajos de los equipos y jugadores en toda la liga. Entre ellas, el excepcional rendimiento de tiro de Nikola Jokić y las continuas dificultades de los Orlando Magic presentan un fuerte contraste en el actual panorama del baloncesto. Comenzando con la brillantez de Nikola Jokić, la pieza central de los Denver Nuggets sigue desafiando las expectativas. Recientemente, durante un partido contra los Charlotte Hornets, Jokić intentó un asombroso total de 14 triples—un récord personal—convirtiendo seis de ellos. Su tiro ha sido nada menos que espectacular, ya que actualmente ocupa el cuarto lugar en la liga en precisión de triples con un 44.9 por ciento. Sin embargo, si excluimos esos lanzamientos locos desde toda la cancha que a menudo se realizan al final del tiempo, su porcentaje de tiro real desde más allá del arco se dispararía a un impresionante 48.6 por ciento, colocándolo en la cima de la liga. El tres veces MVP no solo está aumentando sus estadísticas; también está teniendo una temporada fenomenal, promediando máximos en su carrera en puntos y asistencias, mientras se encuentra entre los tres primeros en puntos, rebotes y asistencias por partido. Jokić está a punto de convertirse en solo el tercer jugador en la historia de la NBA en promediar un triple-doble de 30 puntos, consolidando aún más su candidatura para un cuarto premio MVP. Su estilo de juego es un testimonio de cómo la analítica y la habilidad tradicional en el baloncesto pueden unirse para crear una fuerza imparable. En el otro extremo del espectro se encuentran los Orlando Magic, cuyas dificultades en el tiro se han convertido en una preocupación significativa. En su reciente partido contra los Atlanta Hawks, les tomó más de 18 minutos convertir un tiro en salto, y terminaron el juego con un desalentador 6 de 25 en tiros de tres puntos. Actualmente, los Magic están acertando solo el 30.5 por ciento de sus intentos de tres, una cifra que no solo los coloca cerca de la parte inferior de la liga, sino que también refleja las luchas de los Minnesota Timberwolves de 2012-13—el último equipo en registrar números de tiro tan pobres. A pesar de contar con una plantilla joven y prometedora, la incapacidad de los Magic para encestar ha limitado sus capacidades ofensivas. Esta temporada, aún no han logrado terminar por encima de los nueve últimos en puntos por posesión, una tendencia que ha persistido desde la salida de Dwight Howard. Sus adquisiciones en la agencia libre, incluido Kentavious Caldwell-Pope, no han resultado como se esperaba, lo que complica aún más sus problemas de tiro. Sin ningún jugador que esté lanzando en un promedio de la liga desde el perímetro esta temporada, es evidente que los Magic necesitan encontrar desesperadamente un base confiable y mejorar su tiro exterior para desbloquear su potencial. Los datos estadísticos revelan que los Magic están lanzando cinco puntos porcentuales por debajo de su porcentaje esperado de triples—una tendencia que podría obstaculizar su ascenso en la clasificación de la Conferencia Este. Sus desafíos en el tiro se ven complicados aún más por su dependencia de un núcleo joven que, aunque talentoso, puede necesitar más tiempo para desarrollarse en una unidad cohesiva capaz de competir a un nivel más alto. A medida que la NBA continúa evolucionando, las disparidades en la eficiencia y efectividad de tiro entre equipos y jugadores se vuelven más pronunciadas. Mientras que el notable tiro de Jokić muestra las alturas del rendimiento individual, las luchas de los Magic ilustran los desafíos que enfrentan los equipos que no pueden adaptarse a la dinámica cambiante del juego. El camino a seguir para Orlando requerirá no solo una mejora en el tiro, sino también un compromiso para desarrollar su talento joven en una fuerza formidable en la liga.
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