Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
Eddie Howe, el entrenador del Newcastle United, enfrentó un desafío desalentador hace apenas unas semanas. Tras una decepcionante derrota 4-2 ante el Brentford, el ambiente en torno al club era sombrío. La derrota dejó al Newcastle estancado en el 12º lugar de la Premier League, con solo dos victorias en sus 11 partidos anteriores, un marcado contraste con el emocionante empate contra el Liverpool que había encendido brevemente la esperanza. El capitán del club, Bruno Guimaraes, describió la temporada de manera sincera como "muy decepcionante", y los llamados a la reflexión resonaron en la prensa, notablemente por parte de la leyenda del club Alan Shearer, quien advirtió que el equipo se había vuelto "rancio". Sin embargo, tras este tumulto, el Newcastle ha experimentado una transformación notable. En menos de un mes, han ascendido al quinto lugar, manteniéndose invictos en sus últimos cinco partidos en todas las competiciones, anotando 16 goles y concediendo solo uno. Su resurgimiento incluye una victoria histórica en Old Trafford, donde celebraron solo su segunda victoria en liga allí desde 1972. En el corazón del resurgimiento del Newcastle está el reposicionamiento estratégico de jugadores clave, notablemente el centrocampista italiano Sandro Tonali. Al mover a Tonali a un rol más profundo, Howe no solo ha mejorado la estabilidad defensiva del Newcastle, sino que también ha potenciado su fluidez ofensiva. Este cambio ha permitido a Guimaraes ejercer más influencia en posiciones más avanzadas del campo, lo que ha llevado a un aumento significativo en las contribuciones de goles de todo el equipo. Joelinton, Anthony Gordon y Jacob Murphy se han beneficiado de un regreso a posiciones más familiares, lo que ha revitalizado la amenaza ofensiva. El enfoque de Howe hacia el liderazgo y la dinámica del equipo ha jugado un papel crucial en este renacimiento. Tras la derrota ante el Brentford, mantuvo reuniones individuales con cada jugador, promoviendo una cultura de responsabilidad compartida y comunicación abierta. Esta iniciativa ha fomentado la unidad dentro del equipo, permitiéndoles enfrentar colectivamente su rendimiento decepcionante. Guimaraes enfatizó la importancia de estas discusiones para solidificar la identidad del equipo, afirmando: "Para ser un verdadero grupo, a veces necesitas tener discusiones y palabras fuertes". Los ajustes tácticos realizados por Howe también han dado resultados impresionantes. En los últimos ocho partidos, el Newcastle ha visto una notable mejora en sus métricas ofensivas, incluyendo un aumento en los goles anotados por partido y un incremento en los tiros realizados. La introducción de Tonali como figura central ha fortalecido particularmente el mediocampo, permitiendo al Newcastle controlar los partidos de manera más efectiva y dominar la posesión. Defensivamente, las actuaciones del Newcastle han vuelto a la sólida base que caracterizó su campaña en la Liga de Campeones la temporada pasada. Tras el partido contra el Brentford, el equipo ha ajustado notablemente su defensa, sin conceder goles en sus últimos cuatro partidos, un indicador de su mejorada estructura organizativa y resiliencia. El portero Martin Dubravka, quien ha reemplazado al lesionado Nick Pope, ha mantenido cuatro porterías a cero consecutivas, destacando la efectividad del renovado sistema defensivo. A medida que el Newcastle se adentra en un exigente enero, su reciente forma ofrece un nuevo optimismo. La fortaleza mental desarrollada a partir de victorias consecutivas ha transformado la confianza del equipo, permitiéndoles comenzar los partidos con fuerza y afirmar el control desde el principio. Este cambio de mentalidad no solo ha reforzado su rendimiento, sino que también ha cambiado la narrativa en torno al club, que hace apenas semanas parecía destinado a una prolongada caída. Con varios encuentros clave por delante, incluyendo un posible desafío en la FA Cup y consideraciones en el mercado de fichajes, el Newcastle está preparado para continuar su trayectoria ascendente. Los desafíos enfrentados en la primera parte de la temporada pueden haber servido como un catalizador para este cambio, reforzando la noción de que la resiliencia y la adaptabilidad son vitales en el deporte de élite. A medida que Howe y su revitalizado equipo buscan consolidar su lugar entre la élite de Inglaterra, la perspectiva de un regreso a la Liga de Campeones ya no parece un sueño lejano, sino una posibilidad tangible en el horizonte.