Juan Brignardello Vela
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En un sorprendente giro de los acontecimientos, el Red Bull Salzburg ha decidido separar caminos con el entrenador principal Pep Lijnders tras apenas siete meses al mando. La salida se produce después de un período decepcionante que ha visto al club languidecer en el quinto lugar de la Bundesliga austriaca, a asombrosos 10 puntos de los líderes de la liga, Sturm Graz. La etapa de Lijnders, que comenzó con grandes esperanzas, ha estado marcada por una serie de malos resultados, incluyendo una preocupante racha de seis derrotas consecutivas en la Champions League. Lijnders, quien previamente se desempeñó como asistente en el Liverpool, se esperaba que aportara ideas y tácticas frescas a Salzburg, especialmente después de que el club terminara en una sólida segunda posición en la liga la temporada pasada. Sin embargo, las dificultades del equipo esta temporada han llevado a una reevaluación de su trayectoria actual. La decisión de despedir a Lijnders y a su asistente, Vitor Matos—también exmiembro del cuerpo técnico del Liverpool—señala un cambio significativo dentro del club mientras busca frenar su caída. En un comunicado conjunto, el CEO de Salzburg, Stephan Reiter, y el director deportivo, Rouven Schroder, expresaron su decepción con los resultados de la temporada, señalando que el equipo ha estado constantemente por debajo de sus expectativas. "Era evidente que en muchos de nuestros partidos hemos estado muy por debajo de nuestros propios requisitos y objetivos", afirmaron, indicando la necesidad de un "nuevo impulso" para revivir la fortuna del equipo. A pesar de esta rápida decisión, el club reconoció las contribuciones de Lijnders, agradeciéndole por su dedicación y los esfuerzos que realizó durante su breve tiempo al mando. "Puso mucho esfuerzo y pasión en ello y ha proporcionado un impulso importante para nuestro desarrollo futuro", decía el comunicado, reflejando un sentido de gratitud en medio de la decepción. El momento del despido de Lijnders es particularmente notable, ya que se produce solo dos semanas antes de que Jurgen Klopp, el icónico exentrenador del Liverpool, asuma el cargo de jefe global de fútbol de Red Bull. Esta transición plantea preguntas sobre la dirección futura de Salzburg y si la influencia de Klopp jugará un papel en la selección de un nuevo entrenador principal. Mientras el club inicia la búsqueda del sucesor de Lijnders, está bajo presión para hacer un nombramiento oportuno, con la vista puesta en reanudar los entrenamientos el 3 de enero de 2025. Los aficionados y críticos estarán atentos para ver cómo Salzburg navega este momento crítico en su temporada y si el próximo nombramiento gerencial puede restaurar las ambiciones y el rendimiento en el campo del club.