Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
A medida que los clubes de fútbol europeos continúan su camino hacia Estados Unidos para amistosos de pretemporada, el entusiasmo que rodea estos partidos es palpable. El reciente encuentro entre el Barcelona y el Real Madrid en el Estadio MetLife, al que asistieron más de 82,000 aficionados a pesar del mal tiempo, epitomiza la creciente tendencia de los clubes internacionales que abrazan al público estadounidense. El partido no solo mostró la histórica rivalidad de El Clásico, sino que también sirvió como testimonio del creciente atractivo del mercado estadounidense para las franquicias de fútbol. Incluso con la ausencia de algunos jugadores estrella debido a diversos compromisos internacionales, el espectáculo atrajo a una multitud apasionada que se presentó para apoyar a sus equipos. La atmósfera, llena de cánticos y la emoción de los fuegos artificiales con cada gol, destacó la importancia de estos partidos más allá de ser meras exhibiciones; se trata de conectar con los aficionados, construir lealtad a la marca y generar ingresos sustanciales. Informes indican que este amistoso en particular podría generar alrededor de 25 millones de dólares, subrayando los incentivos financieros que acompañan estos tours de verano. Los clubes europeos están tomando nota de Estados Unidos no solo como un mercado lucrativo, sino como un lugar donde pueden fomentar conexiones más profundas con los aficionados. Las recientes giras incluyeron equipos de la Premier League inglesa, La Liga, Serie A y la Bundesliga, con clubes participando en eventos comunitarios y actividades promocionales. Por ejemplo, el Manchester City y el AC Milan organizaron eventos en Nueva York, aprovechando el vasto panorama mediático de la ciudad y la presencia de empresas estadounidenses en sus modelos de propiedad. La interconexión entre la propiedad estadounidense y el fútbol europeo se está volviendo cada vez más evidente. Clubes como el AC Milan y el Manchester City han establecido vínculos sólidos con empresas estadounidenses, como los Yankees y RedBird Capital Partners, respectivamente. Esta relación ha facilitado la expansión de su marca en EE. UU., permitiéndoles capitalizar una base de aficionados que anhela experiencias de fútbol de primer nivel. A medida que EE. UU. se prepara para coorganizar la Copa Mundial de la FIFA 2026, la presión aumenta para que los clubes no solo continúen sus visitas de verano, sino que también mejoren sus ofertas. La perspectiva de que se jueguen partidos más significativos en suelo estadounidense está en el horizonte, especialmente con la FIFA considerando permitir que los partidos de liga doméstica se jueguen en el extranjero. Una declaración del abogado de la FIFA insinuó un posible cambio de política que podría abrir las puertas a juegos de temporada regular en EE. UU., un desarrollo que transformaría el panorama del fútbol en América. La anticipación de partidos de alto riesgo en EE. UU. está creciendo. Notablemente, la primera edición del renovado Mundial de Clubes está programada para llevarse a cabo en 2025, con equipos de todo el mundo compitiendo por honores en estadios estadounidenses. Esta evolución señala que los aficionados al fútbol en América pronto podrían disfrutar de partidos similares a los de la Liga de Campeones, un escenario de ensueño que alguna vez pareció distante. Si bien los amistosos actuales permiten a los clubes europeos construir su marca y base de aficionados, el futuro podría implicar competiciones más serias que resuenen con el público estadounidense a un nivel más profundo. Sin embargo, a medida que las demandas del calendario futbolístico continúan creciendo, equilibrar las obligaciones de la liga doméstica con las apariciones internacionales seguirá siendo un desafío para los clubes. En esencia, EE. UU. ya no es solo una parada para los equipos europeos durante la pretemporada; se está convirtiendo en una parte integral de su estrategia global. A medida que la popularidad del fútbol aumenta en América, los aficionados se preguntan con qué frecuencia tendrán la oportunidad de presenciar a los equipos de élite del mundo competir en su propio terreno. El escenario está preparado para una nueva era en el fútbol donde los aficionados estadounidenses podrían tener la oportunidad de ver a sus clubes favoritos competir en partidos de alto riesgo, marcando un emocionante capítulo para el deporte en Estados Unidos.