El entrenador de boxeo samoano Lionel Fatu Elika fallece a los 60 años, dejando un legado de inspiración.

Lionel Fatu Elika, el estimado entrenador nacional de boxeo de Samoa, falleció trágicamente a la edad de 60 años en la villa de atletas durante los Juegos Olímpicos de París el viernes, según confirmó la Asociación Internacional de Boxeo (IBA). El shock y la tristeza por su prematura muerte resonaron en toda la comunidad deportiva, especialmente entre su equipo y la familia olímpica en general. Ato Plodzicki-Faoagali, el único boxeador de Samoa que compite en los Juegos, compartió un emotivo tributo en las redes sociales, recordando su primer encuentro con Elika cuando solo tenía 15 años, aspirando a unirse al equipo juvenil de boxeo de Samoa. “Eras un entrenador amable y generoso, no solo con tu tiempo y cosas materiales, sino también con tu conocimiento”, escribió Plodzicki-Faoagali, enfatizando el profundo impacto de Elika en su vida y carrera. Lamentó la pérdida del sueño del entrenador de presenciar su primera pelea olímpica, un momento que ambos habían anticipado durante mucho tiempo. La Asociación de Deportes y el Comité Olímpico Nacional de Samoa (SASNOC) emitieron un comunicado confirmando el fallecimiento de Elika, pero se abstuvieron de revelar más detalles, incluida la causa de la muerte. La noticia ha dejado a atletas, entrenadores y oficiales lidiando con el peso emocional de la pérdida, particularmente en un momento tan significativo en sus trayectorias deportivas. Pauga Talalelei Pauga, presidente del NOC de Samoa, elogió el compromiso de Elika con el deporte y su creencia en el espíritu olímpico, destacando el vacío que deja su partida en la comunidad del boxeo y más allá. “Lionel fue uno de los mejores entrenadores de boxeo de Samoa y un gran creyente en el ideal olímpico”, dijo Pauga, afirmando la dedicación y pasión del entrenador que inspiró a innumerables atletas. La IBA hizo eco de estos sentimientos en su declaración, reconociendo la influencia duradera de Elika en el deporte y expresando sus condolencias al Equipo Samoa y a todos los que fueron tocados por su entrenamiento y mentoría. Mientras Plodzicki-Faoagali se prepara para su próximo combate contra el belga Victor Schelstraete, la sombra de la ausencia de Elika pesa mucho. El campeón de los Juegos del Pacífico en dos ocasiones no solo ha llevado las esperanzas de su país a la competencia, sino también la memoria de un entrenador que se dedicó a moldear el futuro del boxeo samoano. En un momento destinado a la celebración y el logro, la pérdida sirve como un recordatorio conmovedor de los lazos forjados en el deporte y el legado dejado por quienes cultivan el talento e inspiran la grandeza.