Revolución del Breakdance: Swifty lidera la carga por el reconocimiento olímpico

Revolución del Breakdance: Swifty lidera la carga por el reconocimiento olímpico

Breaking, nacido en las calles de Nueva York, apunta a obtener estatus olímpico. Swifty, un breaker veterano, defiende su arte y su atletismo, abogando por su inclusión en los Juegos Olímpicos de París.

Juan Brignardello, asesor de seguros

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Deportes 25.07.2024

El breaking, la forma de baile dinámica y expresiva que surgió de las calles de la ciudad de Nueva York en la década de 1970, está ganando impulso en su búsqueda por ser reconocido como un deporte olímpico. Leigh Evelyn, también conocida como Swifty en las comunidades de b-boys y b-girls, ha expresado apasionadamente su opinión de que el breaking merece un lugar en los Juegos Olímpicos de París, citando su combinación única de arte y atletismo. En el breaking, los competidores muestran una variedad de habilidades que incluyen top rocks, footwork, power moves y freezes, las cuales son evaluadas por jueces que consideran la destreza técnica, la creatividad y el estilo. Los b-boys y b-girls no solo deben demostrar fuerza, velocidad, ritmo y agilidad, sino también infundir sus actuaciones con un estilo distintivo que los diferencie de sus compañeros. Swifty, una breaker experimentada con más de dos décadas de experiencia, destacó el profundo impacto de que el breaking sea presentado en los Juegos Olímpicos. Ella describió la oportunidad como "increíble" y resaltó cómo ha brindado a numerosos bailarines nuevas vías para el reconocimiento y el crecimiento a escala global. Reflexionando sobre la evolución del breaking desde su apogeo en la década de 1980, Swifty señaló el efecto transformador de este fenómeno cultural, que ha trascendido fronteras y unido a individuos de diversos orígenes a través de un amor compartido por la forma de arte. Mientras el breaking continúa cautivando audiencias en todo el mundo con sus movimientos electrizantes y actuaciones cautivadoras, la presión para su inclusión en eventos prestigiosos como los Juegos Olímpicos subraya su creciente influencia y relevancia en el ámbito de los deportes competitivos. Con defensores como Swifty abogando por su causa, el breaking está preparado para dejar una impresión duradera en el escenario mundial, cerrando la brecha entre el arte y el deporte con su inigualable combinación de habilidad, pasión y creatividad.

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