Dallas Cowboys en apuros: Un equipo unidimensional que necesita revivir su juego terrestre.

Dallas Cowboys en apuros: Un equipo unidimensional que necesita revivir su juego terrestre.

Los Dallas Cowboys están enfrentando un gran obstáculo esta temporada: un juego terrestre poco impresionante. Con la partida del ex corredor Ezekiel Elliott y el rendimiento inconsistente de Tony Pollard, el ataque terrestre del equipo ha tenido dificultades para ganar impulso. Corriendo solo en el 42.2 por ciento de sus jugadas, en comparación con el 47.6 por ciento de la temporada pasada, los Cowboys se han vuelto unidimensionales y predecibles. Las estadísticas poco impresionantes de Pollard, con un promedio de 59 yardas por juego y cinco touchdowns terrestres, no han logrado llenar el vacío dejado por Elliott. Esta deficiencia ha costado al equipo contra oponentes más difíciles y en partidos fuera de casa, por lo que es crucial para los Cowboys restablecer un juego terrestre fuerte si quieren tener éxito en los playoffs.

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Deportes 28.12.2023
Los Dallas Cowboys han tenido dificultades con su juego terrestre durante toda la temporada, lo que los convierte en un equipo unidimensional. A pesar de su sólido juego de pases liderado por el mariscal de campo Dak Prescott, su incapacidad para correr eficazmente el balón se ha convertido en una preocupación. El corredor del equipo, Tony Pollard, no ha podido llenar los zapatos del ex corredor Ezekiel Elliott, quien fue dejado ir por los Cowboys. Pollard, quien todavía se está recuperando de una lesión, ha sido inconsistente y no ha brindado la misma producción que la temporada pasada. La falta de un juego terrestre sólido ha hecho que los Cowboys sean predecibles y fáciles de defender. El juego terrestre de los Cowboys ha experimentado un declive esta temporada, con el equipo corriendo solo el 42.2 por ciento de sus jugadas en comparación con el 47.6 por ciento de la temporada pasada. Aunque promedian 115.2 yardas terrestres por partido, han tenido dificultades para ganar yardas de manera efectiva. El rendimiento de Pollard ha sido decepcionante, promediando solo 59 yardas por partido y cinco touchdowns terrestres esta temporada. Sin Elliott para apoyarlo, Pollard no ha podido llevar la carga por sí solo. Los otros corredores del equipo, como Rico Dowdle y el novato Deuce Vaughn, tampoco han podido llenar el vacío dejado por Elliott. La falta de un juego terrestre sólido se ha convertido en un problema importante para los Cowboys, especialmente contra equipos más fuertes y en partidos fuera de casa. En los juegos contra equipos buenos, los Cowboys han tenido dificultades para establecer un ataque terrestre, lo que ha resultado en derrotas. El juego terrestre del equipo también ha sido menos efectivo en estas derrotas, promediando solo 3.7 yardas por acarreo en comparación con las 4.2 yardas por acarreo en sus otros juegos. Esto ha facilitado que las defensas rivales se enfoquen en detener el juego de pases y ejerzan presión sobre Prescott. Si los Cowboys quieren tener la oportunidad de llegar lejos en los playoffs, deberán mejorar su juego terrestre y recuperar la confianza en su ataque terrestre.
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