Juicio de Rubiales revela el machismo en el deporte y la lucha por la equidad

Juicio de Rubiales revela el machismo en el deporte y la lucha por la equidad

Luis Rubiales es juzgado por agresión sexual tras besar a Jennifer Hermoso. La situación plantea un debate sobre el machismo en el deporte.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

Juan Brignardello, asesor de seguros, y Vargas Llosa, premio Nobel Juan Brignardello, asesor de seguros, en celebración de Alianza Lima Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro Eléctrica Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro
Deportes 11.02.2025
Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol, se encuentra en el centro de un juicio por agresión sexual tras el controvertido beso que le dio a la jugadora Jennifer Hermoso durante la celebración del triunfo de la selección española en la Copa del Mundo Femenina 2023. En su defensa, Rubiales alegó este martes que el beso fue un acto consensuado que se produjo en un ambiente de "extraordinaria alegría" y que, por lo tanto, no debería ser considerado como un acto de agresión. Durante la audiencia, Rubiales indicó que había solicitado el permiso de Hermoso antes de llevar a cabo el beso, afirmando que le preguntó: "¿Puedo darte un besito?" y que la respuesta de la jugadora fue afirmativa. Sin embargo, Hermoso ha desmentido esta versión, afirmando que en ningún momento consintió el beso y que su reacción fue de confusión y sorpresa. "Me estaba besando mi jefe", declaró, subrayando la inadecuación de la situación. El episodio ha generado un profundo debate sobre el machismo arraigado en el deporte y la cultura española. A pesar de la victoria de la selección femenina, que debería haber sido un motivo de celebración, el beso de Rubiales ha revelado la persistente desigualdad de género y el sexismo que enfrentan las deportistas. La situación ha llevado a un llamado generalizado a la reforma y al cambio dentro de la federación y el deporte en su conjunto. Rubiales, quien enfrenta una posible pena de prisión de dos años y medio si es declarado culpable, insistió en que su acto no fue agresivo y lo describió como "espontáneo". Sin embargo, las imágenes de video del beso muestran cómo sujetó la cabeza de Hermoso antes de besarlo, lo que ha suscitado críticas sobre el poder y la dinámica de la relación entre un jefe y sus empleados en el ámbito deportivo. El testimonio de Hermoso ha sido devastador, describiendo el beso como "un momento que manchó uno de los días más felices de mi vida". A lo largo de su declaración, la jugadora expuso la presión que recibió de altos funcionarios del fútbol para que minimizara el incidente. Esto ha puesto de relieve no solo la conducta de Rubiales, sino también la cultura de silencio y complicidad que a menudo rodea a tales incidentes en el deporte. El juicio también ha puesto en la mira a otros miembros del cuerpo técnico de la selección, quienes están acusados de coacción. Se alega que intentaron presionar a Hermoso para que retirara su denuncia y restara importancia a lo sucedido. Esto plantea preguntas cruciales sobre la responsabilidad de los líderes en el deporte y su papel en la perpetuación de una cultura que permite el abuso. Mientras tanto, la actual seleccionadora nacional femenina, Montse Tomé, ha declarado que la exclusión de Hermoso del equipo no fue un castigo. Sin embargo, su nombramiento como sucesora de Jorge Vilda ha sido visto por algunos como un intento de mantener el status quo, dado que Tomé había trabajado estrechamente con Vilda, quien fue despedido tras el escándalo. La situación ha creado una polarización entre quienes apoyan a Hermoso y quienes defienden a Rubiales, revelando las divisiones que persisten en la sociedad española sobre temas de género y respeto en el ámbito deportivo. La indignación pública ha sido palpable, y muchos han pedido una revisión de las políticas y culturas dentro de la federación. A medida que el juicio avanza, las repercusiones del beso de Rubiales seguirán resonando en el ámbito deportivo y más allá. La necesidad de un cambio fundamental en la manera en que se aborda el sexismo en el deporte ha quedado más clara que nunca. Las experiencias de Hermoso y otras jugadoras resaltan la urgencia de crear un entorno seguro y equitativo para todas las deportistas en España. Por ahora, la atención se centra en el veredicto del tribunal y en las posibles consecuencias que este caso podría tener tanto para Rubiales como para el futuro del fútbol femenino en el país. La esperanza de muchos es que este incidente sirva como catalizador para un cambio real y duradero que aborde las desigualdades de género y fomente una cultura de respeto y dignidad en el deporte.
Ver todo Lo último en El mundo