Tesla se hundió casi más del 8 % en la apertura de Wall Street tras presentar el robotaxi Cybercab

Tesla se hundió casi más del 8 % en la apertura de Wall Street tras presentar el robotaxi Cybercab

A pesar de la emoción que generó el anuncio, muchos expertos señalan que el desarrollo de los autos podría tardar años. Qué motivos tienen para pensarlo

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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Mundo 11.10.2024

Las acciones de Tesla se desplomaron más del 8 % en su apertura en Wall Street, una reacción que ha sorprendido a analistas e inversionistas tras la presentación del esperado robotaxi Cybercab por parte de Elon Musk en un evento realizado en Los Ángeles. Este nuevo vehículo autónomo, que se prevé comience su producción en 2026 a un precio inferior a 20,000 dólares, ha generado expectativas en el mercado, pero también ha suscitado dudas sobre la viabilidad de su implementación.


Durante la primera hora de operaciones, los títulos de Tesla cayeron un 8.24 %, alcanzando un precio de 218 dólares por acción. Este descenso ha sido interpretado por muchos como un reflejo de la incertidumbre que rodea el desarrollo de la tecnología de vehículos autónomos y los desafíos regulatorios que enfrenta la empresa. El analista Sergio Ávila señala que, a pesar del entusiasmo inicial por el anuncio, la falta de un cronograma claro para la implementación de estos vehículos ha dejado entrever una preocupación entre los inversores.


El evento, titulado "We, Robot", no solo presentó el Cybercab, un vehículo sin volante ni pedales, sino que también mostró un Robovan diseñado para transportar hasta 20 personas. Musk enfatizó que el Cybercab empleará tecnología de inteligencia artificial y cámaras, en lugar de los sensores lidar que son comunes en la competencia. Esta decisión podría implicar un ahorro en costos, aunque también podría presentar desafíos técnicos que la empresa deberá superar.


A pesar de su promesa de que los vehículos autónomos serán significativamente más seguros que aquellos conducidos por humanos, Musk no proporcionó detalles específicos sobre cómo Tesla abordará los desafíos tecnológicos y las normativas que complican el despliegue de esta innovación. Esta falta de claridad ha generado una mezcla de escepticismo y expectativa entre los analistas del sector.


El diseño del Cybercab, inspirado en el famoso Cybertruck, fue recibido con entusiasmo por parte de la audiencia durante su presentación. Sin embargo, la afirmación de Musk de que estos vehículos autónomos "salvarán vidas" se vio acompañada de un reconocimiento de que la empresa ha sido, en el pasado, "optimista" acerca de los plazos de entrega de sus productos. Los inversores parecen estar reevaluando la confianza en la capacidad de Tesla para cumplir con sus ambiciosos planes a tiempo.


La presentación, que comenzó con un retraso significativo debido a una emergencia médica, también incluyó una demostración de los vehículos disponibles para el público, entre los cuales se encontraban tanto el Cybercab como otros modelos de Tesla como el Model 3 y Model Y. Esta táctica parece estar dirigida a permitir que los usuarios experimenten de primera mano lo que Musk describe como el futuro de la movilidad urbana.


Además, Tesla presentó un prototipo de autobús autónomo y su robot Optimus, que Musk dijo estará disponible pronto a un precio potencialmente inferior al de un automóvil convencional. Sin embargo, durante la presentación, las únicas habilidades que demostraron los robots fueron preparar bebidas y bailar, lo que ha suscitado preguntas sobre la viabilidad de sus promesas a largo plazo.


El evento no solo fue un escaparate de la tecnología futura, sino también una ocasión para que Musk reafirmara su compromiso con la innovación en el sector automotriz. Sin embargo, a medida que la emoción inicial por el Cybercab se desvanece, los inversores parecen estar reconociendo que el camino hacia la adopción de vehículos autónomos podría ser más largo y complicado de lo anticipado.


En resumen, el desplome de las acciones de Tesla en el mercado refleja una combinación de escepticismo sobre los plazos de implementación y la capacidad de la empresa para superar los obstáculos regulatorios. Mientras la promesa de un futuro de transporte autónomo se presenta con gran fanfarria, la realidad del desarrollo tecnológico y las exigencias del mercado podrían frenar el avance de estas innovaciones. La comunidad inversora y los analistas estarán atentos a cómo Tesla navega estos desafíos en los próximos meses y años.

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