Desafíos y expectativas en la apertura del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez

Desafíos y expectativas en la apertura del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez

El superintendente de Migraciones, Armando García, dijo que más de 2 500 pasajeros llegarán al Perú en la primera hora del domingo 1 de junio

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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Mundo 31.05.2025

La apertura del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, prevista para el 1 de junio, ha desatado una mezcla de entusiasmo y preocupación entre las autoridades y los viajeros. Mientras que la inauguración de un aeropuerto moderno promete mejorar la experiencia de los pasajeros y aumentar la capacidad de operaciones, la transición entre el antiguo y el nuevo terminal plantea retos logísticos significativos. El superintendente nacional de Migraciones, Armando García Chunga, ha hecho sonar la voz de alerta sobre la inminente acumulación de vuelos y pasajeros durante las primeras horas de funcionamiento del nuevo terminal.


Según García Chunga, se anticipa que en las primeras dos horas de operaciones se recibirán simultáneamente al menos 13 vuelos, lo que representa un flujo de más de 2,500 pasajeros únicamente en la primera hora. Este escenario se establece tras una suspensión total de operaciones de 12 horas que precederá a la apertura, buscando facilitar el traslado de equipos y equipaje. Sin embargo, dicha acumulación también plantea un desafío considerable, especialmente considerando que el nuevo espacio migratorio destinado a las llegadas es más limitado que el de su predecesor.


Las advertencias del superintendente no son menores, ya que el nuevo terminal ha sido diseñado con una reducción significativa en el espacio asignado para la espera de los pasajeros. Esto podría traducirse en largas filas y esperas prolongadas durante las primeras horas, justo cuando la afluencia de viajeros será más intensa. Por tal motivo, el equipo de Migraciones ha tomado medidas para hacer frente a esta situación, incrementando el número de módulos de atención disponibles y habilitando 19 puertas electrónicas para facilitar el proceso.


La coordinación con las aerolíneas ha sido fundamental en este proceso, y se estima que entre 200 y 250 vuelos han sido reprogramados debido a la suspensión. Esta reprogramación es parte de un esfuerzo más amplio por parte de las autoridades para asegurar que la transición sea lo más fluida posible. García Chunga ha enfatizado la importancia de la comunicación con los pasajeros, algo crucial para evitar confusiones y garantizar que todos estén al tanto de los cambios.


El flujo de pasajeros no solo se verá afectado en la llegada, sino que también se prevén complicaciones en el acceso al nuevo terminal. Este acceso será exclusivamente vehicular, por la avenida Morales Duárez, lo que implica que los viajeros deberán estar preparados para una posible congestión en las vías de ingreso. Las autoridades han implementado mejoras viales para facilitar el tránsito, pero el volumen de tráfico que se espera es incierto.


Los orientadores en el nuevo aeropuerto jugarán un papel clave en este proceso, ayudando a minimizar las demoras en el control migratorio y brindando información a los pasajeros. Su presencia está destinada a acelerar el flujo en un momento crítico, donde cada minuto cuenta y la experiencia del viajero está en juego. Aún con estas medidas, la incertidumbre sobre la capacidad real del nuevo terminal para manejar la afluencia inicial continúa siendo motivo de preocupación.


Además de la logística, el ambiente de expectativa y emoción alrededor del nuevo aeropuerto es palpable. Muchos viajeros y turistas están ansiosos por experimentar las mejoras que promete el nuevo terminal, desde instalaciones más modernas hasta un mejor servicio al cliente. Sin embargo, es esencial que tanto los pasajeros como el personal estén preparados para enfrentar los desafíos que vendrán con esta gran inauguración.


La transición hacia el nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez es un hito significativo para el país, no solo por las mejoras en infraestructura, sino por el impacto que tendrá en el turismo y la conectividad internacional. Sin embargo, las advertencias sobre la acumulación de vuelos y la gestión eficiente del flujo de pasajeros subrayan la necesidad de una planificación meticulosa y de una ejecución impecable. Las próximas semanas serán clave para evaluar cómo se manejan estos desafíos y si la transición se realiza de manera ordenada y eficiente.

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