La amenaza de erupción del Monte Spurr crece a medida que el Observatorio Volcánico de Alaska emite una advertencia urgente.

La amenaza de erupción del Monte Spurr crece a medida que el Observatorio Volcánico de Alaska emite una advertencia urgente.

El Observatorio de Volcanes de Alaska advierte sobre la posible erupción explosiva del Monte Spurr, instando a los residentes a prepararse para los peligros de las cenizas.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

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Los investigadores del Observatorio Volcánico de Alaska han emitido una advertencia sobre la probabilidad de una erupción explosiva del Monte Spurr, situado aproximadamente a 80 millas al oeste de Anchorage, la ciudad más grande de Alaska. Las emisiones de gas aumentadas detectadas durante vuelos sobre el volcán el viernes y el martes, junto con un aumento en la actividad sísmica desde la primavera de 2024, indican que se ha formado nuevo magma debajo del volcán. Esto ha llevado a los científicos a concluir que una erupción podría ocurrir en las próximas semanas o meses, aunque enfatizan que no es una certeza. El Monte Spurr ha estado en estado de asesoría desde octubre, tras una serie de pequeños terremotos y signos de inquietud volcánica. Si bien los investigadores informaron inicialmente que había igual probabilidad de que ocurriera una erupción o se evitara, el análisis más reciente sugiere que los residentes cercanos al volcán deberían prepararse para uno o más eventos explosivos. Los precedentes históricos de las erupciones de 1953 y 1992 ilustran la posible severidad de una erupción, siendo el último evento responsable de aproximadamente un cuarto de pulgada de ceniza que cayó sobre comunidades en el centro-sur de Alaska y provocó el cierre del aeropuerto de Anchorage durante 20 horas. La ceniza volcánica representa un riesgo significativo tanto para la salud como para la infraestructura. Las partículas finas pueden interrumpir la aviación, como lo evidenció un casi desastre en diciembre de 1989, cuando un KLM 747 encontró ceniza de un volcán cercano durante el vuelo, lo que llevó a un aterrizaje de emergencia forzado en Anchorage. La ceniza también puede crear condiciones de conducción peligrosas, reducir la visibilidad y dañar vehículos. Se insta a los residentes a tomar precauciones, especialmente para evitar inhalar ceniza. Jeremy Zidek, portavoz de la División de Seguridad Nacional y Manejo de Emergencias del Estado, enfatizó la importancia de minimizar la exposición usando mascarillas cuando estén al aire libre y limitando los viajes si ocurre una erupción. El Observatorio Volcánico de Alaska ha indicado que, a pesar del potencial de una caída significativa de ceniza, no se anticipan cortes de energía generalizados ni contaminación de los suministros de agua como resultado directo de la erupción. Si bien la salida de la zona puede complicarse por las nubes de ceniza, los funcionarios no esperan interrupciones a largo plazo en los viajes aéreos, aunque se aconseja a los residentes cercanos que se preparen de inmediato. A medida que la situación se desarrolla, la división de emergencias del estado ha puesto a disposición recursos para que los residentes aprendan cómo prepararse para una posible erupción. Con las evaluaciones más recientes destacando la mayor volatilidad del Monte Spurr, se aconseja a las comunidades locales que se mantengan informadas y vigilantes mientras navegan por las incertidumbres de vivir cerca de uno de los volcanes más activos de Alaska.
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