
Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.




Desastres Naturales 18.02.2025
El 14 de febrero de 2025, un terremoto de magnitud 6.0 golpeó cerca del volcán Fentale en Etiopía, marcando un evento significativo en una zona que ya enfrenta inestabilidad sísmica. El terremoto ocurrió a las 20:28 UTC (23:28 hora local) y se registró a una profundidad superficial de 10 kilómetros (6.2 millas), según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) y corroborado por el Centro Sismológico Euro-Mediterráneo (EMSC).
El epicentro se localizó aproximadamente a 6.6 kilómetros (4.1 millas) al norte-noreste de Metahara, una localidad con una población de 23,403 en la región de Oromiya. También estaba a unas 26 kilómetros (16 millas) al oeste de Awash, hogar de alrededor de 11,415 residentes en la región de Afar. Los temblores del terremoto se sintieron ampliamente, afectando a unas 45,000 personas con sacudidas muy fuertes, mientras que 37,000 experimentaron temblores fuertes y alrededor de 147,000 reportaron sacudidas moderadas.
En respuesta al terremoto, el USGS emitió una alerta verde, sugiriendo una baja probabilidad de víctimas significativas o daños extensos. Sin embargo, la realidad en el terreno es más preocupante, ya que la población local reside predominantemente en edificios que son particularmente vulnerables a tales eventos sísmicos. Los tipos de construcción comunes en la región incluyen bloques de adobe y materiales informales como metal y madera, que están mal equipados para resistir terremotos fuertes.
Este terremoto se produce en medio de una crisis seismo-volcánica en Etiopía, que ha visto una actividad tectónica aumentada desde el 22 de diciembre de 2024. Se cree que los temblores están relacionados con el movimiento de magma dentro del complejo volcánico Fentale, situado en la Gran Rift Etíope. Desde enero, el gobierno ha estado proactivo en reubicar a aproximadamente 80,000 personas de áreas de alto riesgo en Oromiya y Afar a lugares más seguros como medida de precaución.
La reciente actividad sísmica ya ha resultado en daños significativos a la infraestructura, afectando hogares, instalaciones de salud, instituciones educativas y carreteras esenciales. Los informes indican que al menos dos personas han sufrido lesiones debido a los terremotos. Además, la aparición de fisuras en el suelo ha generado preocupaciones sobre la estabilidad de la presa Kesem/Sabure, una estructura crucial que retiene un volumen sustancial de agua. Los expertos advierten que una falla de la presa podría provocar inundaciones catastróficas río abajo, poniendo en peligro la vida de cientos de miles de personas, a pesar de su diseño para resistir terremotos de hasta magnitud 5.6.
A medida que la región continúa enfrentando desafíos sísmicos, se insta a las comunidades locales a permanecer alerta mientras las autoridades evalúan el impacto y trabajan para garantizar la seguridad y preparación ante futuros terremotos. La situación sigue siendo fluida, con implicaciones tanto inmediatas como a largo plazo para los residentes de esta área sísmicamente activa.
Mundo
Controversia En Glastonbury Por Mensajes Políticos Incendiarios De Artistas Musicales
Author 30.06.2025

Política
Conflicto Entre Rutas De Lima Y Alcaldía De Lima Podría Costar 2,700 Millones Al Perú
Author 30.06.2025

Deportes
Ilia Topuria Sueña Con Ser El Primer Triple Campeón De La UFC En La Historia
Author 30.06.2025
