Los legisladores de Missouri presionan para legalizar los silenciadores en medio de controversia y debate sobre la seguridad pública.

En un movimiento controvertido que ha desatado el debate entre legisladores y ciudadanos, dos legisladores de Missouri están abogando por la derogación de la prohibición estatal sobre los silenciadores de armas de fuego. El representante Mike Costlow y el senador Nick Schroer, ambos republicanos, han presentado una legislación destinada a legalizar la posesión y venta de estos dispositivos, que recientemente han cobrado protagonismo tras un trágico asesinato en Nueva York. La urgencia detrás de la propuesta se ha intensificado después del supuesto uso de un silenciador en el asesinato de Brian Thompson, el CEO de UnitedHealthcare. Los legisladores ahora están lidiando con la percepción de su iniciativa en el contexto de eventos tan violentos. Costlow reconoció la posible reacción negativa, afirmando: "Puedo entender por qué la percepción diría que es un mal momento. Pero el resultado habría sido el mismo, ya sea que usara un silenciador o no". Los defensores de la legalización de los silenciadores argumentan que estos dispositivos sirven como una forma de protección auditiva para cazadores y tiradores, reduciendo el riesgo de daño auditivo a largo plazo causado por el ruido de los disparos. Costlow, quien disfruta de cazar ciervos con un silenciador, enfatizó que el dispositivo le permite apreciar los sonidos naturales a su alrededor sin necesidad de incómodos tapones para los oídos. "Básicamente son protección auditiva", comentó, reflexionando sobre las experiencias personales de amigos que han sufrido problemas de audición. Sin embargo, organizaciones como Everytown for Gun Safety están levantando la voz sobre los peligros potenciales de los silenciadores disponibles en el mercado. Argumentan que permitir que dichos dispositivos caigan en manos equivocadas podría representar serios riesgos para la seguridad pública. “Los silenciadores no son un problema de 'protección auditiva'”, afirmó el grupo, abogando en cambio por el uso de métodos tradicionales de protección auditiva. La legislación propuesta también busca proteger a los silenciadores fabricados en Missouri de la persecución federal, un movimiento que reconoce el complejo panorama legal que rodea a los supresores. Las regulaciones federales actuales, derivadas de la Ley Nacional de Armas de Fuego de la década de 1930, requieren que los individuos se sometan a estrictas verificaciones de antecedentes, envíen huellas dactilares y paguen un impuesto de $200 para adquirir un silenciador. A pesar de estos obstáculos, el número de silenciadores registrados en EE. UU. ha aumentado de 1.3 millones en 2017 a más de 4.8 millones en julio de 2024, destacando una creciente aceptación entre los propietarios de armas. A medida que los legisladores de Missouri se preparan para la próxima sesión legislativa, se anticipan debates sobre los derechos y regulaciones de armas. Junto con la propuesta de silenciadores, hay una serie de proyectos de ley respaldados por republicanos en la mesa, que incluyen medidas para restringir a los bancos de utilizar códigos de tarjetas de crédito para compras de armas y prohibir las leyes de bandera roja destinadas a evitar que quienes atraviesan crisis de salud mental obtengan armas. Mientras tanto, los demócratas también han presentado su propia serie de medidas de control de armas, incluidas propuestas para verificaciones de antecedentes universales y restricciones de edad sobre ciertas armas de fuego. Con el inicio de la sesión legislativa el 8 de enero, el futuro de la medida sobre silenciadores sigue siendo incierto. Costlow admitió: "Estoy presentando las cosas que me apasionan... Soy un recién llegado, así que no espero que se logre mucho". A medida que se desarrollen estas discusiones, los residentes y legisladores de Missouri estarán observando de cerca cómo la interacción entre las preocupaciones de seguridad pública y los derechos individuales dará forma al enfoque del estado sobre las regulaciones de armas de fuego.