Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
HANA, Hawái - Los residentes de Maui experimentaron un temblor inesperado la noche del jueves cuando un pequeño terremoto, medido con una magnitud de 3.7, sacudió la isla justo antes de las 9 p.m. El epicentro del sismo se localizó en la remota comunidad de Hana, situada en la costa oriental de la isla, a una profundidad de aproximadamente seis millas. El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) confirmó que el temblor se sintió ampliamente en Maui, extendiendo su alcance a la Isla Grande y Moloka’i. Afortunadamente, no se han reportado lesiones ni daños a la propiedad como resultado del evento. Descritos como "poco comunes", los terremotos de esta naturaleza son relativamente raros en Maui. Según el Observatorio de Volcanes de Hawái, la actividad sísmica se atribuye típicamente a ajustes dentro de la corteza terrestre, un fenómeno influenciado por el considerable peso de las islas hawaianas. Este evento sirve como un recordatorio de las dinámicas geológicas en juego en la región, donde la interacción entre placas tectónicas puede dar lugar a ocurrencias sísmicas. A pesar del impacto notable del terremoto, el evento no ha afectado a los cercanos volcanes Mauna Loa o Kīlauea en la Isla Grande, que son algunas de las características geológicas más significativas de Hawái. Mauna Loa, reconocido como el volcán más grande del mundo por volumen, y Kīlauea, uno de los volcanes más activos del planeta, continúan siendo monitoreados por el Observatorio. Los expertos han indicado que no hay motivo inmediato de preocupación respecto a erupciones volcánicas, ya que el terremoto no ha provocado cambios en su estabilidad. El Observatorio de Volcanes de Hawái se mantiene vigilante en el monitoreo de los volcanes en busca de signos de inquietud, especialmente dado el reciente aumento en la actividad sísmica observado en Kīlauea. Se ha asegurado al público que no hay amenaza de tsunami como resultado del terremoto, lo que permite a los residentes respirar con alivio. Mientras los residentes de Maui evalúan el evento y sus implicaciones, la comunidad se mantiene resiliente ante su singular entorno geológico. El terremoto sirve como un recordatorio de las poderosas fuerzas naturales que actúan bajo la superficie y la continua necesidad de preparación en una región acostumbrada tanto a la belleza como a la imprevisibilidad de su paisaje volcánico.