Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En la secuela de los huracanes Helene y Milton, que devastaron el sureste de los Estados Unidos en septiembre y octubre de 2024, surgió un rayo de esperanza en forma del programa IEEE MOVE (Movilización de Outreach utilizando el Compromiso de Voluntarios). Mientras las tormentas desataban vientos que alcanzaban hasta 290 kilómetros por hora, causaron estragos en hogares, infraestructura y líneas de comunicación, dejando a innumerables sobrevivientes en una necesidad urgente de asistencia. El impacto de los huracanes fue severo, con cortes de energía generalizados que interrumpieron los servicios esenciales. Muchos residentes se encontraron aislados de sus seres queridos, incapaces de cargar sus teléfonos celulares o acceder a Internet para obtener información vital sobre los esfuerzos de recuperación. Fue en este momento crítico que la flota de vehículos de respuesta a desastres de IEEE MOVE se movilizó para restaurar la energía, la luz y la conectividad en las áreas afectadas. El programa MOVE opera tres vehículos especializados diseñados para proporcionar recursos esenciales a las comunidades que enfrentan las secuelas de desastres naturales. Los tres vehículos fueron desplegados en respuesta a la destrucción causada por los huracanes Helene y Milton. "Cientos de clientes de la Cruz Roja y docenas de miembros del personal fueron ayudados por las tecnologías traídas a los sitios de desastre por los vehículos MOVE, subrayando el apoyo crítico que IEEE brinda en tiempos de crisis", dijo Loretta Arellano, directora del programa. En colaboración con organizaciones como la Cruz Roja Americana, los voluntarios de MOVE utilizaron generadores en MOVE-1 y MOVE-2 para suministrar electricidad a los refugios, mientras también habilitaban el acceso para cargar hasta 100 teléfonos inteligentes simultáneamente. Esta capacidad resultó vital tanto para los sobrevivientes de desastres como para el personal de la Cruz Roja, asegurando que los canales de comunicación esenciales permanecieran abiertos. En regiones donde la infraestructura de comunicación tradicional había sido comprometida, los vehículos MOVE emplearon antenas satelitales de Starlink para restaurar los servicios de Internet y telefonía, permitiendo a los residentes reconectarse con sus familias y acceder a información crucial sobre los esfuerzos de recuperación. Una reciente adición a la flota, MOVE-3, introducida en agosto, ha mejorado la flexibilidad del programa. Su diseño modular permite la rápida instalación y despliegue de equipos de energía y telecomunicaciones en las instalaciones de la Cruz Roja, asegurando que la ayuda pueda dejarse atrás incluso mientras el equipo MOVE se desplaza a asistir otros lugares. “Esa capacidad de ‘dejar ayuda atrás’ permite que la furgoneta despliegue equipos mientras el equipo se mueve a otros lugares”, explicó Tim Troske, líder de operaciones de MOVE-3. Esta adaptabilidad es particularmente significativa para responder a varios desastres naturales, incluidos incendios forestales y terremotos. Como señaló Walt Burns, miembro senior de IEEE y voluntario de MOVE, el diseño único de MOVE-3 permite un despliegue rápido. “Si ocurriera un desastre natural en Hawái, tomaría demasiado tiempo enviar la furgoneta allí”, comentó. “Pero la furgoneta podría ser conducida hasta el aeropuerto para que un voluntario de MOVE descargara el equipo y lo pusiera en un avión para ser enviado a través del Pacífico por carga aérea.” El vehículo MOVE-3 también está equipado con un paquete de baterías de iones de litio de 4 kilovatios-hora, que puede alimentar servicios de telecomunicaciones durante hasta 48 horas con una sola carga. Esta batería se puede recargar utilizando un panel solar portátil o el alternador del vehículo, añadiendo otra capa de sostenibilidad a la operación. La capacidad y flexibilidad de la flota IEEE MOVE han demostrado ser invaluables en la secuela de los huracanes Helene y Milton. A medida que continúan los esfuerzos de recuperación, la dedicación de voluntarios como Burns es evidente. "Realizar la misión de IEEE de avanzar la tecnología para la humanidad es la razón por la que somos voluntarios para hacer este trabajo", dijo, reforzando el compromiso del programa de apoyar a las comunidades en crisis y mostrando el poder de la tecnología para ayudar en los esfuerzos de recuperación.