Terremoto devastador de 7.3 grados golpea Vanuatu, dejando 14 muertos y cientos de heridos.

Terremoto devastador de 7.3 grados golpea Vanuatu, dejando 14 muertos y cientos de heridos.

Un terremoto de magnitud 7.3 en Vanuatu ha dejado 14 muertos y cientos de heridos. Los esfuerzos de rescate continúan en medio de la infraestructura dañada y problemas de comunicación.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

Juan Brignardello, asesor de seguros, y Vargas Llosa, premio Nobel Juan Brignardello, asesor de seguros, en celebración de Alianza Lima Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro Eléctrica Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro

Al menos 14 personas han sido confirmadas muertas y cientos más heridas tras un poderoso terremoto de magnitud 7.3 que golpeó la costa de Vanuatu el martes. El terremoto, que ocurrió justo antes de la 1 p.m. hora local a una profundidad de 57 kilómetros (35 millas), tuvo su epicentro aproximadamente a 30 kilómetros al oeste de Port Vila, la capital y ciudad más grande de la nación insular. Las operaciones de rescate comenzaron de inmediato, con los equipos de emergencia trabajando incansablemente durante la noche en un esfuerzo por alcanzar a las personas atrapadas bajo los escombros. Imágenes en redes sociales capturaron escenas de frenéticos esfuerzos de rescate, incluyendo intentos de liberar a ocho individuos que se cree están atrapados en un edificio de tres pisos colapsado. Amanda Laithwaite, una residente local, informó que su esposo estaba entre los rescatistas que escucharon voces pidiendo ayuda desde debajo de los escombros. Su progreso fue descrito como lento pero constante, con algo de éxito, ya que tres personas fueron rescatadas con vida de los escombros durante la noche. La Cruz Roja ha indicado que la situación es grave, con más de 200 heridos reportados. El hospital principal en Port Vila ha sufrido daños, y la infraestructura crucial, incluidos los sistemas de suministro de agua, ha sido comprometida. Los daños a las comunicaciones locales han obstaculizado la capacidad de emitir informes oficiales oportunos, dejando a muchos residentes en la incertidumbre sobre la magnitud total del desastre. En un comunicado, la oficina humanitaria de las Naciones Unidas expresó su preocupación por el acceso severamente restringido al aeropuerto y al puerto debido a los daños generalizados en las carreteras, lo que complica los esfuerzos para entregar la ayuda tan necesaria. Con los servicios telefónicos aún fuera de servicio, la comunicación se ha vuelto cada vez más difícil, y se ha aconsejado a los residentes que se mantengan alejados de las costas mientras se restablecen los sistemas de monitoreo de tsunamis y terremotos. El impacto del terremoto se extendió más allá del costo inmediato en vidas humanas; los edificios diplomáticos en Port Vila, incluidos aquellos que albergan embajadas de Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y Nueva Zelanda, sufrieron daños significativos. Si bien se ha informado que el personal de la embajada está a salvo, las operaciones están actualmente suspendidas. Las operaciones de vuelo también se han visto gravemente afectadas. Las aerolíneas de Australia y la región del Pacífico han suspendido vuelos, a la espera de actualizaciones sobre el estado del aeropuerto internacional de Vanuatu, donde se han reportado daños en la pista. En respuesta a la crisis en desarrollo, la ministra de Relaciones Exteriores de Australia, Penny Wong, anunció que el gobierno australiano se está preparando para desplegar asistencia inmediata a Vanuatu, incluidos equipos de búsqueda y rescate urbano y equipos médicos de emergencia. Dada la ubicación de Vanuatu en una zona de subducción, terremotos de esta magnitud no son infrecuentes. Sin embargo, la infraestructura y el sistema de salud del país no están equipados para manejar un desastre a gran escala, lo que complica aún más los esfuerzos de rescate y recuperación. Mientras la nación lidia con las consecuencias inmediatas de esta calamidad, la comunidad internacional observa de cerca, lista para ofrecer apoyo para ayudar al pueblo de Vanuatu a reconstruir y recuperarse de este trágico evento.

Ver todo Lo último en El mundo