El artista de Atlanta, Sahbabii, brilla con fuerza con su nuevo álbum "Saheem", fusionando diversión y profundidad.

El rapero de Atlanta, Sahbabii, está causando sensación en la escena del hip-hop con su último lanzamiento, "Saheem", que ha ganado rápidamente reconocimiento como uno de los álbumes de rap más destacados del año. A sus 27 años, Sahbabii, nacido como Saheem Malik Valdery, ya ha encontrado un nicho significativo en el género, construyendo sobre el éxito de sus primeros éxitos como "Pull Up Wit ah Stick" y "Marsupial Superstars". Su trabajo anterior, especialmente el álbum de 2021 "Do It For Demon", fue un emotivo tributo a un amigo de la infancia perdido, mostrando un tono más oscuro que diverge de la absurda ligereza que inicialmente definió su sonido. El camino hacia "Saheem" fue un esfuerzo de tres años, que Sahbabii describe como un renacimiento personal. Lanzado con poca fanfarria el mes pasado, el álbum ha resonado profundamente con los fans, lo que se atribuye en gran medida a su musicalidad cautivadora en lugar de a amplios esfuerzos promocionales. "Creo que una página de fans anunció el álbum antes de que yo lo hiciera", bromea, destacando su enfoque en crear música de calidad por encima de las estrategias de marketing. Temas como "Viking", impulsados por su contagioso ritmo y letras memorables, ejemplifican el atractivo del álbum. La canción llamó la atención del artista Tyler, the Creator, quien la elogió en las redes sociales, elevando aún más el perfil de Sahbabii. En una reciente grabación de video musical para "Viking", Sahbabii recorrió las calles de Brooklyn, ondeando orgullosamente una bandera personalizada que presenta su imagen en lugar del habitual logo de los Minnesota Vikings. Su elección de Nueva York como telón de fondo no es una casualidad; aprecia la autenticidad de los barrios de la ciudad. El video refleja su compromiso con la expresión genuina, una ética que permea el álbum mismo. El enfoque de Sahbabii hacia la música es en gran medida instintivo, especialmente en lo que respecta a la selección de ritmos. En el momento en que escuchó el ritmo de "Viking", estaba listo para sumergirse. "Es como: 'Vamos a cargar eso'", recuerda, enfatizando la espontaneidad que a menudo caracteriza su proceso creativo. "Saheem" es un tapiz de tales momentos, fusionando sin esfuerzo la emoción con una estética desenfadada que contrasta con los temas más pesados de "Do It For Demon". Canciones como "Belt Boyz" incorporan de manera creativa el argot regional mientras mantienen una vibra juguetona, mostrando la versatilidad de Sahbabii. Al conocer a Sahbabii en un entorno íntimo, habla sobre la evolución de su sonido y las lecciones aprendidas durante la creación de "Saheem". Su nueva apreciación por el proceso de producción pulida surge después de pasar de grabaciones en casa a sesiones de estudio profesionales. Inicialmente dudoso, Sahbabii pronto se encontró prosperando en el entorno del estudio, especialmente en temas como "Sylvan Rd Riding Down Dill", que destacan su destreza lírica y su estilo vocal único. El proceso de escritura de Sahbabii es en gran medida intuitivo; lo compara con un programa de cocina donde ciertos ingredientes deben combinarse para crear algo especial. Esta espontaneidad creativa es evidente en cómo elabora sus letras, a menudo inspirándose en diversas influencias, incluidos dibujos animados y deportes, que reflejan su espíritu juguetón. Sin embargo, reconoce las complejidades de la vida adulta, particularmente las responsabilidades de la paternidad, que han profundizado su empatía y comprensión de las emociones. A lo largo de los años, Sahbabii ha mantenido un equilibrio entre la diversión y la seriedad en su música, explorando temas de asombro infantil, trauma y crecimiento personal. Sus letras resuenan con los oyentes no solo por su naturaleza juguetona, sino también por su autenticidad y relación. A medida que navega por los desafíos de ser padre, sigue comprometido con su arte, recordándonos que incluso frente a la adversidad, el corazón de un niño sigue vivo en él. Con "Saheem", Sahbabii no solo ha reafirmado su lugar en el hip-hop, sino que también ha establecido un nuevo estándar para la música introspectiva pero entretenida, un poderoso testimonio de su crecimiento como artista y ser humano.