Malibú en alerta máxima mientras el incendio Franklin obliga a evacuaciones y amenaza monumentos comunitarios.

MALIBU, California. — El incendio Franklin, un feroz y rápidamente propagado incendio forestal, ha arrojado una sombra sobre Malibu, obligando a la evacuación de hasta 20,000 residentes, incluidos queridos celebridades como Dick Van Dyke y Cher. A medida que las llamas estallaron tarde el lunes y consumieron más de 2,800 acres en solo 24 horas, la comunidad se preparó para lo peor mientras esperaba noticias sobre sus hogares. Para el martes, el Servicio Nacional de Meteorología anunció una mejora anticipada en las condiciones climáticas, que los bomberos esperan que ayude en sus esfuerzos por combatir el fuego. Los dañinos vientos de Santa Ana, notorios por sus ráfagas secas y poderosas, han pasado por ahora, aunque aún persisten condiciones críticas de incendio mientras las ráfagas continúan en las regiones montañosas. Los residentes, muchos de los cuales han vivido durante mucho tiempo en esta pintoresca área famosa por sus impresionantes vistas al océano, esperan ansiosamente actualizaciones sobre la seguridad de sus propiedades. El incendio Franklin ha causado estragos en Malibu, un enclave costero conocido no solo por su belleza natural, sino también por sus residentes famosos y su próspera comunidad ecuestre. A medida que las llamas se acercaban a la Universidad Pepperdine, aproximadamente 3,000 estudiantes se vieron obligados a refugiarse en el campus, navegando entre el humo y las cenizas tras el avance del fuego. Si bien la causa del incendio sigue bajo investigación, las evaluaciones iniciales del Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles sugieren que se han perdido varias estructuras, con el alcalde Doug Stewart refiriéndose a las últimas 20 horas como traumáticas para la ciudad. La urgencia de la situación llevó a las autoridades a reubicar las operaciones en Calabasas, ya que el fuego amenazaba el Ayuntamiento de Malibu. Van Dyke, que está a punto de celebrar su 99 cumpleaños, confirmó que él y su esposa, Arlene Silver, lograron evacuar su hogar de manera segura, aunque estaban ansiosos por su gato, Bobo, que escapó durante su salida. Cher, que también evacuó, se encuentra actualmente en un hotel mientras su hogar sigue en riesgo. El fuego, que se desplazó hacia el sur poco después de comenzar, representó una amenaza significativa para sitios icónicos, incluido el histórico muelle de Malibu. Los bomberos trabajaron diligentemente para proteger estos puntos de referencia mientras manejaban las llamas que saltaban sobre la Autopista del Pacífico, una ruta a menudo bordeada de casas de lujo. Los cortes de energía afectaron a alrededor de 40,000 clientes, incluidos 11,000 en el Condado de Los Ángeles, ya que Southern California Edison implementó medidas preventivas contra el riesgo de incendio agravado por los fuertes vientos. Este apagón recuerda las lecciones aprendidas del catastrófico incendio Woolsey en 2018, que fue provocado por equipos similares. A pesar de las narrativas de celebridades que rodean a Malibu, los líderes comunitarios expresan una profunda preocupación por las familias de clase baja y media que son la columna vertebral del área. Kasey Earnest, directora ejecutiva del Club de Niños y Niñas de Malibu, enfatizó la importancia de reconocer a estos residentes que contribuyen significativamente a la comunidad local, afirmando: "Son solo familias normales—nadie está aterrizando un helicóptero en su propiedad." Mientras Malibu se une para enfrentar este desastre, los residentes permanecen vigilantes y esperanzados por una rápida respuesta de los bomberos y el regreso a la normalidad en su querida comunidad. Las luchas compartidas durante esta crisis destacan tanto la resiliencia como la interconexión de la comunidad de Malibu, independientemente del estatus de celebridad.