Mujer sancionada en Yaruquí por quema ilegal de troncos en área forestal

Mujer sancionada en Yaruquí por quema ilegal de troncos en área forestal

Mujer sancionada en Yaruquí por quema no autorizada de madera. Alcalde de Quito busca erradicar estas prácticas peligrosas para el medio ambiente.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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En un preocupante suceso ocurrido en Yaruquí, una mujer ha sido sancionada por las autoridades de Quito tras ser sorprendida usando fuego de manera no autorizada en un área cercana a un bosque. La actividad, que consistía en la quema de troncos de madera con el fin de producir y comercializar carbón, fue detectada por la Agencia Metropolitana de Control, que actúa como ente regulador en estas situaciones. El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, ha expresado su firme intención de tomar medidas drásticas contra quienes atenten contra el medio ambiente. En su declaración, resaltó la necesidad de imponer sanciones a los responsables de estas actividades que no solo son ilegales, sino que también representan un grave peligro para la integridad de los bosques y la seguridad de la población. La quema no autorizada de materiales en zonas susceptiblemente peligrosas ha sido catalogada como una de las causas primarias de los incendios forestales que han afectado a la región en los últimos años. Esto no solo pone en riesgo la flora y fauna local, sino que también amenaza la vida de las personas y sus hogares. El compromiso del alcalde es claro: se deben erradicar estas prácticas irresponsables y fomentar una cultura de respeto hacia la naturaleza. Las sanciones aplicables en estos casos son variadas y dependen de la gravedad de la infracción. Por ejemplo, las sanciones consideradas como leves oscilan entre 1 y 25 salarios básicos unificados, lo que se traduce en multas que van desde USD 460 hasta USD 1,500. Entre estas se incluyen acciones como fumar en áreas propensas a incendios forestales o impedir el acceso a los servicios de emergencia. Por otro lado, las infracciones graves pueden conllevar multas más severas, que van de 3 a 45 salarios básicos unificados (USD 1,380 a USD 2,070). Esto incluye el uso no autorizado del fuego en áreas de restauración de ecosistemas o la quema de residuos en vías y espacios públicos. Estas sanciones son un llamado de atención para aquellos que todavía piensan que sus acciones no tienen consecuencias. Las infracciones muy graves, que pueden alcanzar multas de entre 5 y 75 salarios básicos unificados (USD 2,300 a USD 34,500), son aún más preocupantes. Aquellos que provocan incendios forestales a través de la pirotecnia o en ecosistemas frágiles se enfrentan a serias repercusiones legales. La protección de áreas naturales y de espacios verdes urbanos es fundamental para el bienestar ambiental y social de la ciudad. El mensaje de las autoridades es claro: la ciudadanía debe reflexionar sobre su comportamiento y actuar con responsabilidad. Los incendios forestales son una de las principales amenazas que enfrenta Quito, y muchos de estos desastres son provocados por acciones humanas que podrían haberse evitado. Por tanto, es fundamental que los habitantes tomen conciencia de la importancia de cuidar y preservar el entorno. Las estadísticas son alarmantes. Según informes recientes, la mayoría de los incendios en la región han sido provocados por negligencia o acciones irresponsables de individuos que no consideran las consecuencias de sus actos. Es vital que se fomente la educación ambiental y se refuercen las normativas para prevenir futuros incidentes. Finalmente, la comunidad debe unirse en la lucha contra estas prácticas que ponen en peligro tanto el medio ambiente como la vida de las personas. La colaboración entre las autoridades y los ciudadanos es esencial para crear un entorno seguro y sostenible. Cada acción cuenta, y es responsabilidad de todos proteger los recursos naturales que nos rodean.

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