Temblor en Los Santos reanima la importancia de la preparación sísmica en Colombia

Temblor en Los Santos reanima la importancia de la preparación sísmica en Colombia

Un temblor en Los Santos, Santander, genera inquietud, pero no hay daños ni víctimas. Colombia debe estar preparada ante sismos constantes.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

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En la mañana del 3 de septiembre, un temblor sacudió la región de Los Santos, en Santander, generando inquietud entre sus habitantes. Según el Servicio Geológico Colombiano (SGC), el evento sísmico se registró a una profundidad superficial, aunque afortunadamente no se reportaron daños graves ni víctimas. Esta actividad sísmica es un recordatorio de que Colombia es un país donde los movimientos telúricos son una constante, producto de la interacción de diversas placas tectónicas en la región. Colombia, posicionada sobre las placas Nazca, Sudamérica y Caribe, experimenta en promedio 2.500 sismos al mes, lo que equivale a aproximadamente 80 movimientos diarios. Sin embargo, la mayoría de estos sismos son tan leves que no son perceptibles para la población. Las costas del Pacífico y del Caribe, así como las áreas montañosas, son las zonas donde la actividad sísmica es más intensa. A pesar de esto, un sismo puede ocurrir en cualquier parte del país, lo que subraya la importancia de la preparación y la educación sobre los riesgos sísmicos. Es fundamental que la población esté informada sobre qué hacer en caso de un temblor. El SGC insiste en que, aunque los sismos son una realidad constante, no necesariamente están aumentando en frecuencia. La percepción de un mayor número de temblores se debe a la mejor conciencia pública y al acceso a información más precisa y oportuna. En este sentido, las plataformas digitales han jugado un papel crucial en la diseminación de datos sobre sismos, permitiendo a las personas reportar sus experiencias a través del formulario "Sismo Sentido". La recolección de datos sobre sismos percibidos es vital para que las autoridades puedan estimar rápidamente los efectos de un evento sísmico y movilizar a los organismos de atención de emergencias. Cada vez que se registra un sismo, los usuarios en redes sociales tienen la oportunidad de informar sobre su experiencia, lo que ayuda a las entidades a determinar la intensidad del movimiento y a evaluar posibles daños en infraestructuras y comunidades. Los sismos son causados por la liberación de energía acumulada en el subsuelo, generada principalmente por el movimiento de las placas tectónicas. Sin embargo, también pueden ser provocados por actividades volcánicas y algunas acciones humanas, como la extracción de recursos o la inyección de fluidos en el subsuelo. Estos fenómenos naturales pueden tener distintas repercusiones en el entorno, desde daños estructurales hasta deslizamientos de tierra. La magnitud y profundidad de un sismo se establecen mediante sofisticados equipos de monitoreo que registran los movimientos del terreno. Aunque la escala de Richter fue históricamente la referencia más utilizada, actualmente se emplean métodos más precisos como la escala de magnitud de momento. En la práctica, esto significa que se debe referir a un sismo por su magnitud, sin el uso de grados. Entender cómo funciona la sismicidad es crucial para la seguridad pública. Cuando un temblor ocurre, se generan diferentes tipos de ondas que son registradas por estaciones sismológicas. La velocidad y el tiempo de llegada de estas ondas permiten a los expertos calcular la ubicación y profundidad del sismo, información esencial para la respuesta ante emergencias. Ante la incertidumbre que un sismo puede generar, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) ha establecido una serie de recomendaciones para la población. Estas incluyen mantener la calma, buscar un lugar seguro donde refugiarse y seguir las instrucciones de las autoridades locales. Prepararse con antelación y conocer las rutas de evacuación son medidas que pueden marcar la diferencia en momentos de crisis. La experiencia del temblor en Los Santos es una llamada a la acción para que los ciudadanos se informen y estén preparados ante futuros eventos sísmicos. La prevención y la educación son herramientas poderosas para minimizar el impacto de los sismos en nuestras comunidades. A medida que continuamos viviendo en esta región sísmicamente activa, es esencial que todos asumamos la responsabilidad de estar listos y actuar con prudencia.

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