Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un movimiento significativo destinado a promover hábitos más saludables de uso de pantallas entre niños y adolescentes, las autoridades de salud suecas han publicado nuevas pautas que recomiendan no exponer a los niños menores de dos años a pantallas y limitar el tiempo de pantalla para los grupos de mayor edad. Estas recomendaciones llegan en medio de crecientes preocupaciones sobre los posibles impactos negativos del uso excesivo de medios digitales en la salud y el bienestar de los jóvenes. Las pautas, anunciadas por Folkhälsomyndigheten, la agencia de salud pública de Suecia, marcan un cambio fundamental en la forma en que se regula el tiempo de pantalla, una parte omnipresente de la vida moderna, dentro de los entornos familiares. Para los niños de dos a cinco años, el tiempo de pantalla no debe exceder una hora al día, mientras que se aconseja a los niños de seis a doce años limitar su uso de pantallas a no más de dos horas. Para los adolescentes de trece a dieciocho años, las autoridades de salud han recomendado un máximo de tres horas de tiempo de pantalla al día. Estos límites contrastan marcadamente con los promedios actuales, donde se informa que los niños de nueve a doce años pasan cuatro horas al día frente a pantallas, y los adolescentes mayores, de diecisiete a dieciocho años, superan las siete horas al día, excluyendo el tiempo dedicado a tareas escolares. Jakob Forssmed, ministro de asuntos sociales de Suecia, enfatizó la urgencia de estas pautas, declarando: "Durante demasiado tiempo hemos permitido que las pantallas y las aplicaciones roben tiempo y atención a expensas de lo que sabemos que se necesita para sentirnos bien. Los medios digitales pueden tener efectos negativos en la salud, incluyendo un sueño deteriorado y síntomas de depresión." Las declaraciones del ministro resuenan con un creciente cuerpo de investigación que vincula el tiempo de pantalla excesivo con diversos problemas de salud entre los jóvenes. Estas pautas también abogan por un mayor compromiso de los padres en relación con el uso de la tecnología. Se alienta a los padres a ser conscientes de su tiempo de pantalla frente a sus hijos y a comunicarse abiertamente sobre sus actividades digitales. Forssmed destacó la importancia de modelar comportamientos saludables, afirmando: "Como padres, ustedes son un modelo a seguir." Este llamado a la conciencia se extiende a las rutinas antes de dormir, con recomendaciones de que los niños deben abstenerse de usar pantallas antes de irse a dormir y que los dispositivos no deben estar permitidos en los dormitorios durante la noche. Las pautas llegan en un momento en que otros países también están reconsiderando su enfoque hacia los niños y la tecnología. En Francia, un estudio científico realizado a principios de este año concluyó que los niños menores de tres años no deben tener exposición a pantallas, y el gobierno está experimentando con una prohibición de teléfonos móviles en las escuelas para niños de hasta quince años. Suecia también está contemplando una restricción similar para los estudiantes de educación primaria. Helena Frielingsdorf, investigadora de la autoridad de salud pública, destacó que las nuevas pautas proporcionan un marco no solo para regular el tiempo de pantalla, sino también para fomentar conversaciones sobre el papel de los medios digitales en la vida de los niños. Forssmed reiteró este punto, afirmando que estas recomendaciones buscan facilitar discusiones críticas sobre las experiencias en línea, los peligros que pueden surgir y el impacto general del uso de pantallas en la salud. En un mundo donde las pantallas se han arraigado profundamente en la vida cotidiana, las pautas de la autoridad de salud sueca representan una intervención oportuna. Al establecer recomendaciones claras y apropiadas para cada edad, buscan empoderar a los padres y cuidadores para que tomen medidas proactivas hacia asegurar que los niños y adolescentes puedan disfrutar de los beneficios de la tecnología sin comprometer su salud y bienestar. A medida que la sociedad continúa navegando por la era digital, estas pautas representan un paso vital para promover un enfoque equilibrado en el uso de pantallas.