Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En "Good Nature", la profesora Kathy Willis, una figura destacada en biodiversidad en Oxford, explora los profundos beneficios para la salud de interactuar con el mundo natural. El libro no es solo un resumen científico; es un llamado a reconectar con la naturaleza en nuestras vidas cada vez más urbanizadas. Basándose en una abundante investigación, Willis revela cómo incluso pequeñas interacciones con plantas y vegetación pueden llevar a mejoras significativas en nuestra salud mental y física, resonando profundamente en una era donde el estrés y la ansiedad son rampantes. Un descubrimiento sorprendente destacado en el libro proviene de un estudio en la Universidad de Chiba en Japón, donde los trabajadores de oficina que colocaron un jarrón con rosas rosas en sus escritorios experimentaron efectos fisiológicos calmantes en solo cuatro minutos. El simple acto de rodearnos de flores puede disminuir los niveles de estrés, haciéndonos más relajados e incluso conductores más seguros, una revelación que subraya el potencial terapéutico de la presencia floral en nuestros entornos diarios. La fascinación de Willis por los poderes curativos de la naturaleza comenzó durante su tiempo en los Jardines de Kew, donde se topó con investigaciones que vinculaban las tasas de recuperación de los pacientes tras una cirugía de vesícula biliar con la visibilidad de los árboles desde las ventanas de sus hospitales. Esta correlación se extiende a entornos educativos, donde los estudiantes expuestos a la vegetación a través de las ventanas del aula mostraron un rendimiento mejorado y menos estrés, apoyando aún más la noción de que la naturaleza influye positivamente en nuestro bienestar cognitivo y emocional. El libro profundiza en las bases científicas de por qué la naturaleza tiene un efecto tan calmante sobre nosotros. En la década de 1990, el científico del comportamiento Roger Ulrich propuso la teoría de la reducción del estrés, sugiriendo que nuestra atención inherente a las escenas naturales provoca un estado emocional más positivo, lo cual ha sido respaldado por investigaciones posteriores. Los cambios fisiológicos desencadenados por observar la naturaleza mejoran nuestra resiliencia al estrés, resonando con los paisajes de nuestros ancestros en la sabana africana. Además, Willis explora el poder del olor, señalando que los compuestos fragantes liberados por los árboles de coníferas pueden reducir drásticamente las frecuencias cardíacas y contribuir a sensaciones de relajación. Esta conexión entre nuestras experiencias olfativas y la salud refuerza el argumento a favor de integrar la naturaleza en nuestras vidas diarias, abogando por prácticas simples como caminatas diarias en espacios verdes o incluso la incorporación de plantas de interior en nuestros hogares. Sin embargo, a pesar del contenido atractivo, algunos críticos de "Good Nature" argumentan que Willis podría haber infundido su escritura con más historias personales y narrativas cautivadoras para atraer aún más a los lectores. Aunque el libro examina a fondo la ciencia emergente de los beneficios para la salud de la naturaleza, a veces pierde oportunidades para abordar las implicaciones sociales más amplias de la desigualdad en el acceso a los espacios verdes. Por ejemplo, su observación de que los distritos con mayores densidades de árboles reportan menos prescripciones de antidepresivos plantea preguntas críticas sobre la planificación urbana y la equidad social que merecen una exploración más profunda. No obstante, "Good Nature" no pasa por alto la agencia individual en el acceso a los beneficios de la naturaleza. Willis proporciona sugerencias prácticas para incorporar más vegetación en nuestras vidas, enfatizando que no necesitamos esperar cambios sistémicos para cosechar estas recompensas. Desde comprometerse a realizar una caminata diaria en la naturaleza hasta embellecer nuestros hogares con plantas, el libro inspira a los lectores a dar pequeños pero impactantes pasos hacia una mejor salud mental. En un mundo donde la provisión pública de espacios verdes está disminuyendo y los entornos urbanos a menudo obstaculizan nuestro bienestar, "Good Nature" de Kathy Willis sirve tanto como un recordatorio como una guía. A medida que navegamos por nuestras vidas ocupadas llenas de estrés, un simple ramo de flores o un momento pasado al aire libre podría ser el remedio que necesitamos. El libro nos anima a abrazar activamente la naturaleza y destaca el potencial de incluso pequeños cambios para fomentar una vida más saludable y feliz. Inspirados por las ideas de Willis, muchos lectores pueden sentirse más inclinados a cultivar su pulgar verde e invitar a la naturaleza a sus rutinas diarias; después de todo, un poco de poder floral puede tener un gran impacto.