Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En un esfuerzo por combatir la creciente ola de adicción a los medicamentos para el dolor, NHS Fife está liderando una iniciativa destinada a reducir la dependencia de fármacos altamente adictivos como los opioides y las benzodiazepinas. El dolor crónico afecta a miles de residentes en toda Escocia, y aunque estos medicamentos han sido durante mucho tiempo una opción de tratamiento común, su potencial de adicción plantea riesgos significativos para los pacientes que buscan alivio. Con una de las tasas de prescripción más altas de Escocia para estos medicamentos, el nuevo enfoque de NHS Fife enfatiza un espectro más amplio de tratamientos diseñados para abordar el dolor persistente mientras se minimiza la dependencia de soluciones farmacéuticas. Este cambio se produce a medida que los profesionales de la salud reconocen cada vez más las complejidades de la gestión del dolor crónico y la importancia de los planes de atención individualizados. Suzie Morley, una paciente de 43 años que ha navegado valientemente por los obstáculos del dolor crónico durante una década, encarna las luchas que muchos enfrentan. Inicialmente afectada por dolores punzantes en su espalda, la condición de Morley evolucionó gradualmente hacia una fuente persistente de incomodidad que obstaculizaba su capacidad para realizar actividades diarias, desde limpiar su hogar hasta socializar con amigos. “Nunca estoy sin dolor”, reflexiona. “Es como si mi cuerpo estuviera gritando ahora mismo, pero vives con ello tanto tiempo que se convierte en parte de ti”. Su historia no es inusual; muchos pacientes se encuentran atrapados en un ciclo de dosis crecientes y adicción, lo que puede deteriorar aún más su calidad de vida. A la luz de esto, NHS Fife está trabajando para ofrecer alternativas como la terapia física, la terapia cognitivo-conductual y otros enfoques holísticos que pueden ayudar a manejar el dolor crónico sin el pesado costo de los medicamentos adictivos. La iniciativa del consejo de salud se alinea con un movimiento creciente en el ámbito de la salud que reconoce la necesidad de estrategias de manejo del dolor integrales. En los últimos años, los profesionales de la salud han comenzado a abogar por una comprensión más matizada del dolor, reconociéndolo como un problema multifacético que a menudo requiere más que solo medicamentos. Pacientes como Morley están encontrando lentamente esperanza en estos nuevos métodos. Después de participar en los programas alternativos de NHS Fife, ha logrado reducir significativamente su uso de analgésicos. Aunque el dolor sigue siendo un compañero constante, aprecia el progreso que ha logrado. “Mi vida no es perfecta, pero me siento empoderada para tomar el control de mi condición en lugar de dejar que ella me controle”, comparte. A medida que NHS Fife continúa evolucionando sus estrategias de manejo del dolor, el enfoque no se limita a reducir las prescripciones, sino también a mejorar el bienestar general de los pacientes. Al fomentar una mayor conciencia y comprensión de los desafíos del dolor crónico, los profesionales de la salud buscan equipar a los pacientes con las herramientas y el apoyo necesarios para navegar sus experiencias de manera más efectiva. El camino hacia la reducción de la dependencia de medicamentos para el dolor adictivos es complejo, sin embargo, iniciativas como las de NHS Fife iluminan las posibilidades de cambio. Para muchos pacientes, representa un paso crucial hacia la recuperación de sus vidas y la búsqueda de un alivio sostenible que no conlleve el riesgo de adicción. A medida que más consejos de salud sigan este ejemplo, la esperanza es que el futuro del manejo del dolor esté guiado por la compasión, la comprensión y un compromiso con la atención holística al paciente.