Alerta del IGP sobre sismo devastador en Perú: Preparación y prevención son clave

En una reciente declaración que ha generado preocupación y reflexión en la población, Hernando Tavera, presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú (IGP), ha alertado sobre la alta probabilidad de un sismo devastador frente a la costa central del país. En el programa La Rotativa del Aire - Edición Noche de RPP, Tavera indicó que desde el 2015, su institución ha estado advirtiendo sobre las condiciones que podrían propiciar un movimiento telúrico de magnitud 8.8. Las palabras del especialista no solo destacan la vulnerabilidad geológica del Perú, sino que también hacen un llamado urgente a la preparación y prevención ante tales eventualidades. Tavera enfatizó que, si bien la naturaleza no puede ser controlada, es posible identificar las áreas de alto riesgo y prepararse adecuadamente para enfrentar las consecuencias de un sismo. "Puede ser de acá a un año, 50 años, 100 años, pero el sismo va a ocurrir", afirmó, subrayando la certeza de que el movimiento telúrico es inevitable. Esta afirmación subraya la necesidad de que la población y las instituciones adopten un enfoque proactivo en la gestión del riesgo sísmico. La reciente advertencia del IGP pone de manifiesto la importancia de desarrollar una cultura de prevención en el Perú. En este contexto, Tavera recordó que el próximo 15 de agosto se llevará a cabo el Segundo Simulacro Nacional Multipeligro del año, una oportunidad clave para que la ciudadanía practique y se familiarice con los protocolos de seguridad. La participación activa de la población en estos simulacros es esencial para minimizar el impacto de un posible desastre. El presidente del IGP también resaltó cómo la información y las advertencias sobre el riesgo sísmico han influido en las políticas públicas. "Ha permitido que los simulacros ya no se hagan para un sismo de magnitud 8, sino para uno de 8.8", indicó, destacando la necesidad de actualizar las estrategias de gestión de riesgos ante la realidad de un potencial sismo de gran magnitud. Este cambio en la perspectiva de la prevención es un paso crucial para la seguridad de la población. La realidad sísmica del Perú, ubicado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, implica que la población debe estar siempre en alerta y preparada. Las autoridades, junto con el IGP, han trabajado para mejorar la infraestructura y los protocolos de emergencia, pero la participación de la comunidad es igualmente vital. La formación de una cultura de prevención requiere un compromiso colectivo. Además de los simulacros, la educación sobre cómo actuar durante un sismo es fundamental. Las instituciones educativas, desde la escuela primaria hasta la universidad, deben incluir en sus programas de estudio información sobre seguridad sísmica y cómo reaccionar ante una emergencia. Esto no solo empodera a la ciudadanía, sino que también crea una red de apoyo en caso de una eventualidad. Es importante considerar que la preparación no solo implica acciones reactivas, sino también proactivas. Las familias deben tener un plan de emergencia que incluya un lugar de encuentro, un kit de suministros y un medio de comunicación establecido. La prevención es la mejor defensa ante lo inevitable, y cada miembro de la comunidad tiene un papel que desempeñar en este esfuerzo. Por otro lado, el IGP continuará monitoreando la actividad sísmica y brindando información actualizada sobre los riesgos. La transparencia en la comunicación de estos datos es crucial para que la población pueda tomar decisiones informadas y participar activamente en la prevención. La colaboración entre el gobierno, las instituciones y la sociedad civil es esencial para construir un país más resiliente ante desastres naturales. Finalmente, ante la advertencia de un sismo potencialmente devastador, es crucial que la sociedad tome en serio las recomendaciones del IGP. La preparación es la clave para reducir el impacto de un desastre y proteger a las comunidades. La historia nos ha enseñado que en momentos de crisis, aquellos que están mejor preparados son los que logran sobreponerse a la adversidad.