Gino Alva y Brenda Román reciben premio por su novela gráfica sobre conservación ambiental

Gino Alva y Brenda Román reciben premio por su novela gráfica sobre conservación ambiental

"La Última Novia de la Selva Peruana" de Gino Alva y Brenda Román gana el Concurso Nacional de Novela Gráfica, abordando la conservación ambiental.

Juan Brignardello, asesor de seguros

Juan Brignardello Vela

Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.

Juan Brignardello, asesor de seguros, y Vargas Llosa, premio Nobel Juan Brignardello, asesor de seguros, en celebración de Alianza Lima Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro Eléctrica Juan Brignardello, asesor de seguros, Central Hidro
Mundo 06.08.2024

La novela gráfica "La Última Novia de la Selva Peruana", creada por los talentosos Gino Alva y Brenda Román, ha capturado la atención del país al ser galardonada con el Concurso Nacional de Novela Gráfica Inédita 2024, organizado por el Ministerio de Cultura. Este reconocimiento no solo resalta la calidad artística de la obra, sino que también pone de manifiesto la relevancia de su temática en el contexto actual de conservación ambiental y tráfico de especies. La obra se inspira en experiencias reales de Alva, quien, durante un voluntariado en la reserva ecológica Taricaya en Madre de Dios, se vio inmerso en el mundo de la conservación de la fauna. La historia de Maruja, una mono de la selva que representa la lucha por la supervivencia en un hábitat cada vez más amenazado, se erige como el eje central de la narrativa. "Participar en la liberación de estos animales fue un momento transformador para mí", expresa Alva, quien encuentra en esta experiencia el impulso para dar vida a un relato que educa y sensibiliza. El trabajo conjunto con Brenda Román ha sido fundamental para dar forma a esta novela gráfica. Román, quien desempeñó un papel crucial al integrar la investigación periodística en el guion, señala que, aunque el proceso fue demandante, permitió explorar las profundidades del tema. "Tocar fibras sensibles en una historia que refleja la realidad de nuestra selva y sus habitantes es un reto, pero a su vez, una oportunidad para generar conciencia", afirma Román. El concurso que los premiaba llegó como un reconocimiento a un esfuerzo que comenzó mucho antes de su anuncio. A pesar de que hubo interés de un medio digital para publicar su historia, ese proyecto no se materializó. Sin embargo, Alva y Román mantuvieron su empeño y continuaron trabajando en su novela gráfica, lo que les permitió llegar al jurado del certamen. Este jurado valoró no solo la calidad gráfica de la obra, sino también su originalidad y la profundidad de su mensaje. El respaldo del Ministerio de Cultura es un impulso significativo para la pareja creativa, que ahora se dedica a perfeccionar su obra. Alva y Román están comprometidos a ofrecer una historia que no solo entretenga, sino que también eduque sobre la importancia de la conservación de la fauna y la flora peruanas. La novela gráfica se convierte así en un medio para abrir un diálogo sobre la situación actual de la biodiversidad en el país. El auge de la novela gráfica como forma de expresión artística y educativa en el Perú se refleja en el éxito de Alva y Román. Su obra no solo se presenta como un producto cultural, sino como un llamado a la acción sobre la protección de los ecosistemas en la Amazonía. Además, la novela gráfica tiene el potencial de llegar a un público diverso y fomentar la empatía hacia la vida silvestre. La historia de "La Última Novia de la Selva Peruana" es un testimonio del potencial de la narración gráfica para abordar temas serios y relevantes. La combinación de arte y narrativa permite explorar la complejidad de la relación entre los humanos y la naturaleza, llevándonos a reflexionar sobre nuestra responsabilidad hacia el medio ambiente. Los creadores de esta obra ya están pensando en futuras publicaciones que continúen esta línea temática. "Queremos seguir creando obras que reflejen la riqueza de nuestra fauna y la importancia de su conservación", comentan, reafirmando su compromiso con la causa ambiental. La novela gráfica se convierte en un puente entre el arte y la naturaleza, y el reconocimiento que han recibido Gino Alva y Brenda Román es un claro indicativo de que las voces jóvenes en la cultura peruana están listas para abordar los desafíos contemporáneos con creatividad y pasión. Su obra es un ejemplo de cómo el arte puede ser un catalizador de cambio y un vehículo para la sensibilización en torno a temas cruciales para nuestro país.

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