Ecuador lanza campaña para prevenir incendios forestales en temporada seca 2024

Ecuador se encuentra actualmente en una etapa crítica, enfrentando condiciones climáticas que favorecen la ocurrencia de incendios forestales. Con el inicio de la temporada seca, las autoridades han lanzado la campaña "Juntos prevenimos los incendios forestales 2024", que busca movilizar a la población en la prevención de estos desastres ambientales. La presentación de esta iniciativa se llevó a cabo el lunes 5 de agosto y se enmarca dentro de un esfuerzo estatal por abordar la creciente preocupación sobre el impacto de los incendios en la biodiversidad y los ecosistemas del país. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) ha advertido que las provincias de Guayas, Imbabura, Pichincha, Azuay y Loja ya han registrado incendios, lo que indica que la situación es alarmante. Vladimir Arreaga, director de Pronósticos y Alertas Hidrometeorológicas, enfatizó que entre agosto y noviembre es común que se produzcan aumentos en la actividad de incendios debido a la falta de humedad y las altas temperaturas, lo que resalta la urgencia de la campaña. Las estadísticas proporcionadas por la Secretaría de Gestión de Riesgos son reveladoras: durante el año 2024, se han reportado 1.078 incendios que han afectado a más de 7.700 hectáreas de cobertura vegetal en varias provincias. Este número es indicativo de un problema estructural que no solo afecta a la flora, sino también a la fauna y a las comunidades que dependen de estos ecosistemas para su sustento. La respuesta del Ministerio de Agricultura se ha centrado en la implementación de buenas prácticas agrícolas. Silvana Vallejo, representante de esta cartera, mencionó que se ha capacitado a 200 extensionistas rurales y se ha brindado asistencia técnica a aproximadamente 8.000 productores. Este enfoque busca mitigar la quema de desechos agrícolas, promoviendo en su lugar técnicas como el compostaje. La creación de un sello agroecológico para aquellas unidades productivas que adopten estas prácticas también se perfila como una medida importante en la lucha contra los incendios. En el ámbito educativo, el Ministerio de Educación ha respondido también a este desafío. Sofía León, de la Cartera de Estado, indicó que se han capacitado a cerca de 200.000 actores educativos para la gestión de riesgos. Además, se ha implementado la figura del brigadista en cada una de las 56.000 instituciones educativas del país, lo que fortalece la capacidad de respuesta ante emergencias. El proyecto Amazonía sin Fuego, liderado por el Ministerio del Ambiente, es otra de las iniciativas destacadas en esta campaña. Daniel Segura, su gerente, explicó que la finalidad no es solo crear conciencia sobre la prevención, sino también fomentar acciones concretas y coordinadas para proteger los bosques y páramos. Esta visión integral es fundamental para abordar la problemática de los incendios forestales desde múltiples frentes. Entre las acciones específicas propuestas se incluye la difusión de cuñas radiales en español y quichua, que busca llegar a una audiencia más amplia y diversa. Asimismo, se han desarrollado contenidos educativos adaptados a diferentes formatos para su difusión tanto local como digital. La campaña también incorpora la figura de Urko el Puma, mascota que simboliza la prevención de incendios forestales y que se busca promover entre la población. Además, la iniciativa contempla actividades de reforestación, la implementación de mochilas de prevención de incendios y la organización de ferias ambientales y agropecuarias. Estos esfuerzos pretenden no solo crear conciencia, sino también impulsar la participación activa de la comunidad en la protección del medio ambiente. Las cifras son alarmantes, con un total acumulado de 25.851 incendios entre 2010 y 2023, que han devastado más de 251.000 hectáreas de vegetación natural, plantaciones forestales y tierras agropecuarias. La magnitud de estas pérdidas subraya la necesidad urgente de una acción colectiva y coordinada para prevenir futuros desastres. La campaña "Juntos prevenimos los incendios forestales 2024" no solo representa un llamado a la acción, sino que también es un recordatorio de la fragilidad de nuestros ecosistemas. La colaboración entre el Estado, las organizaciones comunitarias y la ciudadanía será crucial para mitigar el impacto de estos incendios y preservar la riqueza natural de Ecuador para las futuras generaciones.