Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
El próximo 15 de agosto, Galicia verá activada una nueva edición de la Operación Centinela Gallego, una iniciativa destinada a prevenir los devastadores incendios forestales que anualmente azotan la región. El despliegue militar, que se extenderá hasta el 30 de septiembre, contará con la participación de un centenar de militares voluntarios provenientes de la Brilat de Pontevedra y del Tercio Norte de Ferrol, quienes se encargarán de patrullar un vasto territorio de 4.414 kilómetros cuadrados de monte, abarcando 39 concellos gallegos. El comandante Álvaro Palacios, jefe de operaciones de la Brilat, explicó que diariamente se activarán treinta patrullas compuestas por dos militares cada una, lo que subraya la magnitud y la importancia de esta operación. Además, Palacios destacó la gran acogida que tienen estas misiones entre los soldados, señalando que la mayoría de los participantes son gallegos, lo que añade un componente de arraigo y compromiso local a la iniciativa. "Es una misión muy gratificante", afirmó, reflejando el espíritu de servicio que predomina entre los militares. Uno de los aspectos más significativos de esta operación es el uso de tecnología avanzada para la detección temprana de incendios. Entre los recursos disponibles se encuentra un avión no tripulado, un modelo Raven, que podrá operar tanto de día como de noche. Este dron tiene la capacidad de emitir señales de vídeo en tiempo real, lo que facilitará a las brigadas de combate de incendios la identificación de focos y la planificación de su respuesta. "Nuestro objetivo fundamental es evitar que se produzcan incendios forestales", enfatizó Palacios, subrayando la misión de disuasión y alerta temprana que llevan a cabo los militares. La conselleira do Medio Rural, María José Gómez, participó en la presentación de esta operación, destacando el papel crucial de la colaboración entre distintas administraciones y la sociedad en la lucha contra el fuego. "A loita contra o lume é cousa de todos, de todas as administracións e tamén da sociedade no seu conxunto", subrayó, reafirmando la necesidad de un esfuerzo conjunto para abordar esta problemática que afecta a la comunidad gallega. Gómez también expresó su confianza en que la presencia de los efectivos militares en el terreno no solo ayudará a prevenir incendios, sino que también minimizará las consecuencias de aquellos que logren producirse. Este enfoque proactivo se suma a las numerosas estrategias que se han implementado en Galicia para hacer frente a la crisis de los incendios forestales, que han tenido un impacto devastador en la biodiversidad y la economía de la región. El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, también se refirió a la importancia de la colaboración interinstitucional, anunciando que este verano se dispondrá de cerca de 4.000 efectivos entre la Unidad Militar de Emergencias (UME), la Guardia Civil, la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de Laza, y otros cuerpos de seguridad y emergencias. Con este despliegue, se busca fortalecer las capacidades de prevención y respuesta ante incidentes que amenacen la seguridad y el medio ambiente gallego. Además, Losada confirmó que con este contingente se sumará un número significativo de aeronaves, incluyendo aviones, helicópteros y aviones ligeros. Este refuerzo aéreo será clave para asegurar una respuesta rápida y efectiva a cualquier conato de incendio, mejorando así la capacidad de intervención de los equipos en el terreno. La Operación Centinela Gallego se presenta como un esfuerzo integral que involucra no solo a las fuerzas armadas, sino también a distintas administraciones y la ciudadanía en su conjunto. La concienciación sobre la importancia de proteger los montes y bosques gallegos es vital, especialmente en un contexto climático que favorece la aparición de incendios. Con la activación de esta operación, las autoridades gallegas esperan no solo prevenir la ocurrencia de incendios, sino también fortalecer la cultura de la prevención y la colaboración entre diferentes sectores de la sociedad. La lucha contra los incendios forestales es un tema que trasciende la política y la administración, convirtiéndose en un desafío compartido que requiere del compromiso y la acción coordinada de todos. A medida que se acerca la fecha de inicio de la operación, la expectación crece entre la población gallega, que confía en que estas medidas contribuirán a proteger su entorno natural y sus recursos, vitales para la identidad y economía de la región.