Juan Brignardello Vela
Juan Brignardello, asesor de seguros, se especializa en brindar asesoramiento y gestión comercial en el ámbito de seguros y reclamaciones por siniestros para destacadas empresas en el mercado peruano e internacional.
En su mensaje a la nación con motivo de las Fiestas Patrias, la presidenta Dina Boluarte abordó uno de los temas más sensibles para la población: el acceso al agua potable. En un contexto donde la privatización de servicios básicos ha suscitado un intenso debate y preocupación, Boluarte hizo un llamado claro y contundente: "Durante mi gobierno no se privatizará el agua". Esta declaración busca tranquilizar a una ciudadanía que ha manifestado dudas sobre el futuro del servicio de agua, especialmente en sectores más vulnerables. La mandataria subrayó la importancia de que el acceso al agua sea tratado como un derecho humano fundamental, un mensaje que resuena con fuerza en un país donde muchos aún enfrentan desafíos para obtener este recurso esencial. En este sentido, su afirmación se presenta como un compromiso para garantizar que el agua siga siendo un servicio público y no un producto susceptible de privatización, lo que podría elevar los costos y limitar el acceso para los más necesitados. Boluarte también expresó su gratitud hacia el Congreso por la reciente aprobación de la Ley de Acceso Universal al Agua Potable. Este marco legal, que busca cerrar las brechas sociales en el acceso a servicios básicos, fue presentado como una solución inmediata para las familias que actualmente carecen de acceso a agua potable de calidad. La presidenta resaltó que esta ley es un paso fundamental hacia la construcción de un país más equitativo y justo. La implementación de esta ley se espera que comience en el cuarto trimestre de 2024 y contempla la instalación de sistemas no convencionales de abastecimiento de agua, tales como plantas potabilizadoras portátiles y piletas públicas. Estas medidas están diseñadas para atender las necesidades inmediatas de las comunidades que enfrentan mayores dificultades en el acceso al agua, mostrando una voluntad política de abordar de manera efectiva estos problemas. La mandataria también lanzó un mensaje de unidad, enfatizando que la aprobación de esta ley es un reflejo del compromiso conjunto entre el gobierno y el legislativo para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos. "La decisión que tomó este Pleno demuestra la voluntad política de trabajar unidos por el cierre de brechas sociales en nuestro país", afirmó Boluarte, instando a todos los sectores a colaborar en esta tarea. Sin embargo, la cuestión del agua no solo se limita a su acceso, sino que también involucra aspectos de gestión y sostenibilidad. La presidenta se comprometió a que su gobierno trabajará para que el servicio de agua potable y alcantarillado sea más eficiente y justo. Esto implica no solo asegurar la disponibilidad del recurso, sino también una gestión adecuada que evite la corrupción y promueva la transparencia en la distribución. El hecho de que esta declaración se realice en un contexto de celebración nacional resalta la importancia del agua en la vida cotidiana de los peruanos. En un país donde las desigualdades son marcadas y el acceso a servicios básicos como el agua puede ser un desafío, el compromiso de Boluarte puede ser visto como un rayo de esperanza para muchas familias que luchan día a día por garantizar este derecho. Sin embargo, la implementación de estas políticas será lo que realmente marcará la diferencia. Los ciudadanos ahora esperan acciones concretas que respalden las palabras de la presidenta y que se traduzcan en mejoras palpables en sus comunidades. La verdadera prueba del compromiso del gobierno estará en la capacidad de llevar adelante estas iniciativas y de garantizar que el agua, como derecho humano, sea efectivamente accesible para todos. El mensaje de Boluarte, por lo tanto, no solo es una promesa, sino también un llamado a la acción. En un país donde el agua es un recurso limitado y en ocasiones mal gestionado, la presidenta ha puesto el tema en la agenda nacional, invitando a la población a ser parte de este proceso y a exigir que se cumplan los derechos que les corresponden. Con el horizonte de un mejor acceso al agua, los peruanos mantienen la esperanza de un futuro más justo y equitativo.