La tragedia de Pompeya: terremotos y erupción del Vesubio revelan su devastador final

Hace casi 2.000 años, en el año 79 d.C., la próspera ciudad de Pompeya, en la Antigua Roma, se vio asolada por un devastador evento natural que marcó su trágico fin. La erupción del Monte Vesubio, que arrojó cenizas y lava sobre la ciudad, no fue el único factor que desencadenó la destrucción masiva y la pérdida de miles de vidas. Un reciente estudio realizado por el Istituto Nazionale di Geofisica e Vulcanologia (INGV) de Italia, en colaboración con el Parque Arqueológico de Pompeya, ha revelado la importancia de los fuertes terremotos que sacudieron la región en aquel fatídico año. Este análisis detallado sobre la actividad sísmica asociada a la erupción del Vesubio del año 79 ha traído a la luz nueva información sobre los trágicos sucesos que condujeron a la desaparición de Pompeya. El descubrimiento de dos esqueletos en las ruinas de un edificio en la ciudad ha sido fundamental para comprender cómo la combinación de terremotos y erupción volcánica desencadenaron la tragedia. Estos restos óseos muestran signos evidentes de traumatismos, lo que sugiere que las víctimas perdieron la vida al colapsar los muros de la edificación en la que se encontraban, posiblemente a causa de un seísmo. Plinio el Joven, en sus cartas hace dos milenios, mencionó la presencia de fuertes temblores de tierra durante la erupción del Vesubio. Sin embargo, es la primera vez que se realiza un estudio científico que profundiza en el impacto de estos terremotos en la destrucción de Pompeya. Domenico Sparice, vulcanólogo del INGV-Osservatorio Vesuviano y autor principal del estudio, destaca la importancia de comprender la interacción entre los fenómenos volcánicos y sísmicos para reconstruir los eventos catastróficos que llevaron al colapso de la ciudad. La excavación en la Casa de los Pintores Trabajando reveló detalles intrigantes que llamaron la atención de los investigadores. Las características singulares de los edificios colapsados llevaron a un análisis más profundo, que culminó con el hallazgo de los dos esqueletos con lesiones traumáticas. Mauro Di Vito, director del INGV-Osservatorio Vesuviano, señala que este descubrimiento es clave para desentrañar el misterio detrás de la destrucción de Pompeya. Los investigadores han determinado que las dos personas cuyos restos fueron encontrados sobrevivieron a la primera fase de la erupción, solo para sucumbir posteriormente al colapso de estructuras provocado por los terremotos. Estos hallazgos ofrecen una nueva perspectiva sobre las últimas horas de vida de los habitantes de Pompeya, destacando las decisiones que tomaron y la dinámica de los eventos que determinaron su destino. Valeria Amoretti, antropóloga a cargo del Laboratorio de Investigación Aplicada del Parque Arqueológico de Pompeya, menciona que los individuos encontrados en la excavación podrían haber sido sorprendidos por derrumbes causados por los terremotos, lo que les llevó a una muerte trágica. Los detalles forenses indican que las víctimas intentaron protegerse, evidenciando el caos y la desesperación que reinaban en la ciudad en aquellos momentos de crisis. Estos nuevos hallazgos arrojan luz sobre la compleja interacción entre la erupción volcánica y la actividad sísmica que culminaron en la destrucción de Pompeya. Reconocer el papel crucial de los terremotos en este trágico evento nos acerca a comprender mejor la historia y las experiencias de quienes vivieron aquel fatídico día en el año 79 d.C. La investigación continúa, con la esperanza de arrojar más luz sobre los eventos que marcaron el destino de Pompeya y sus habitantes hace casi dos milenios.